Yahoo Noticias Final de la Libertadores: Todavía no se jugó y la violencia cobra protagonismo
Lo dijimos hace casi un mes atrás, cuando aún ni Boca ni River habían conseguido el pasaporte a la gran final de la Copa Libertadores.
La columna se titulaba: “¿Es viable disputar en Argentina una Final Boca-River?”. Hoy, con los dos partidos confirmados para los sábados 10 y 24 a las 5 de la tarde hora local, la pregunta cobra mayor trascendencia.
Es que este lunes, a cinco días del primer enfrentamiento a disputarse en La Bombonera, ya se vivió el primer caso grave de violencia.
Sucedió en la localidad de Apóstoles, en la provincia de Misiones, donde al parecer ex cuñados, uno hincha de Boca y el otro de River, compartían la casa de uno de ellos llamado Arturo.
El otro, de nombre Oscar, enfureció en medio de una fuerte discusión entre ambos y no tuvo mejor idea que incendiar la vivienda de madera dejándola completamente destruida.
Según fuentes periodísticas del lugar, el agresor huyó y aún permanece prófugo.
En Misiones, la conversación entre dos amigos por la final entre River y Boca se pasó de revoluciones y terminó con una vivienda envuelta en llamas ➡https://t.co/l9bG8dHtzo pic.twitter.com/QO2faigO9I
— Diario Olé (@DiarioOle) November 5, 2018
Hace unas semanas atrás también salió a la luz un video de un particular que filmó una pelea entre hinchas de ambos equipos en plena calle. Fue cuando uno de Boca le robó la bandera a uno de River. La víctima bajó del auto junto a un acompañante y se armó la bataola.
¿Qué ocurrirá cuando se proclame al campeón el 24 de noviembre? ¿Está la sociedad argentina, plagada de violencia generalizada, preparada para semejante desafío?
Esperemos que todo se desarrolle dentro de los parámetros normales y lógicos. Que no tengamos que sufrir consecuencias trágicas como la de hoy en Misiones, donde no hubo muertos por obra y gracia del destino.
Que sea una fiesta para el ganador y que el perdedor sepa asumir, con la tristeza lógica del caso, la derrota. Ojalá así sea.
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