3 claves para entender el buen momento del Bayern

No somos demasiado amigos del spoiler pero la segunda película que Pep Guardiola está facturando en Múnich tiene pinta de acabar con final feliz aunque el arranque del rodaje fuera accidentado. Recordamos ya vagamente las dificultades para imponerse frente al Wolfsburg, aquel empate decepcionante frente al Schalke 04 y el rosario de desajustes propios del post-verano. El Bayern carbura, mira al resto de rivales domésticos por el retrovisor y ha podido llegar al parón internacional con la casa limpia y recogida también en los asuntos europeos.

Los números cantan. Tras despachar a su último rival, el buen Hannover de Tayfun, con un sonoro 4-0, amasan cuatro puntos de ventaja sobre el Hoffenheim, segundo en liga y siete partidos oficiales sin encajar un gol. Golean y amurallan. Los bávaros están rindiendo a la altura de las expectativas, del presupuesto y van intratables en Alemania y en Europa.

Resumimos el buen momento del equipo bávaro con tres claves:

Versatlidad. Guardiola disfruta de una plantilla amplia en posibilidades y eso en manos de un virtuoso táctico es oro. La presión alta en la salida de balón del contrario y el juego combinativo es la base, pero a partir de ahí, el equipo sabe adaptarse cuando el escenario cambia. Alaba es un comodín que puede ocupar varios puestos, Bernat ha hecho lo propio en banda y el centro, Lahm alterna antigua y nueva demarcación, puede jugar con uno o dos puntas puros...

Defensa. El Bayern actual se afana en diferenciarse del que cayó con estrépito ante el Real Madrid en la pasada Champions League lastrado por sus errores defensivos. El equipo presiona en conjunto y con intensidad cuando pierde la pelota y sabe hacerse más corto y solidario en fase defensiva. Tres cuartos de lo mismo sucede cuando les toca replegar.

Xabi Alonso. Espectacular rendimiento del tolosarra, que está despachando en Alemania el arranque de temporada que muchos llevaban tiempo exigiéndole en Madrid. Es la primera referencia en la salida de balón y es un seguro para batir líneas. La incorporación de Alaba como tercer central, otra variación inteligente de Guardiola, le permite jugar más liberado y recibir en zonas cómodas para hacer el pase de calidad. Su combinación con Lahm, unos metros más arriba, desatasca al Bayern.

Ataque. Intensidad en la presión de los hombres más adelantados para dañar cerca del área y variedad. El equipo es versátil, puede jugar con un punta o con dos puros como Lewandowski y Pizarro, y la calidad de los de arriba (Götze, Muller, Robben...) marca la diferencia. 15 goles a favor en liga, dos en contra. Poco más que decir.

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