El Barça se empeña en que haya Liga

El Barça se empeña en que haya Liga

El FC Barcelona volvió a perder en Liga siete días después del Clásico, y esta vez lo hizo en Anoeta, campo maldito históricamente para los blaugrana.

Los de Luis Enrique se dejaron llevar en demasía y han vuelto a darle vida a una Liga que, a falta de seis partidos por jugarse, está más disputada que nunca. Tanto Atlético Madrid, a tres puntos del Barça, como el Real Madrid, a cuatro, están al acecho de un conjunto culé que en las últimas semanas parece desinflarse tras haber estado 39 partidos seguidos sin perder.

Ya el martes pasado, ante el Atlético Madrid por la Champions League, los de Luis Enrique sufrieron más de la cuenta para sacar el partido adelante, y de no haber sido por la rigurosa roja a Fernando Torres, quizás las cosas podrían estar ahora mismo mucho peor para los blaugrana.

La Real Sociedad por su parte, equipo que lleva toda la temporada con inumerables altibajos, podría convertirse en juez y parte de esta Liga, pues el Real Madrid tendrá también que viajar a Anoeta dentro de un mes, uno de los partidos más complicados que le quedan a los blancos en el calendario -- y donde el año perdieron estrepitosamente 4-2.

Pero mirando el calendario justamente vemos que, de los tres competidores por el título, es el Barça quien lo tiene más complicado, a pesar de tener la ventaja en la tabla y el goal average positivo ante Atlético Madrid y Real Madrid. Sin embargo, el equipo jugará tres partidos en casa y otros tres fuera, ante Valencia, Espanyol y Sporting en el Camp Nou --todos ellos complicados de por si--, para luego visitar al Betis, Deportivo y cerrar la Liga en Granada, equipos que se le suelen atragantar a los grandes en sus respectivos estadios.

El Atlético Madrid es el que tiene las cosas más de cara, pues disputará cuatro partidos en casa, ante Granada, Málaga, Rayo Vallecano y Celta de Vigo, en el último día del curso. También tendrá que visitar San Mamés (su cita, a priori, más complicada) y Levante.

Mientras tanto, el Real Madrid tendrá que jugar cuatro partidos fuera, pero dos de ellos serán, a priori (y a juzgar por los resultados de los últimos años) asequibles ante un Getafe de capa caída y el Rayo Vallecano. Los otros dos son estadios históricamente complicados para los blancos, como el ya mencionado Anoeta, y Riazor, aunque bien es cierto que los blancos han sabido salir airosos de ellos (excepto el año pasado con Ancelotti ante la Real Sociedad) en los últimos campeonatos, ambos partidos son de pronóstico reservado.

En casa los blancos recibirán a un Valencia siempre combativo en el Bernabéu y a un Villarreal que parece empezar a quedarse sin gasolina cuando llegamos a la fase complicada del torneo.

Al final, lo único claro es que nada está escrito, y está por ver como afectan las clasificaciones o eliminaciones de los equipos españoles en la Champions League.

Si el Atlético Madrid se lleva el partido en el Calderón ante los de Luis Enrique, podría asestar un golpe anímico durísimo a un Barça acostumbrado a ganar, pero que parece no ser capaz de gestionar las derrotas. Por otra parte, si los blaugrana clasifican a semifinales, está por ver como les puede afectar de cara a lo que queda de Liga, pues parece que Neymar se ha extraviado, que Messi se ha frenado en seco, y que sólo Rakitic, Iniesta y el voraz Luis Suárez pueden mantener el listón alto.

¿Será suficiente para cerrar otra temporada con triplete? Habrá que esperar, pero tras la derrota en Anoeta, está claro que aún hay mucha Liga por delante.

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