El sueño europeo de Memo Ochoa vive su segunda pesadilla

A Ochoa le ha tocado sufrir más que disfrutar su carrera en Europa. Quizá se pensaría que uno de los arqueros con más potencial que ha dado México en la última década iba a tener mejor suerte al momento de iniciar su aventura europea. Lo cierto es que a casi seis años de dejar al América, sufrió ya su segundo descenso en su paso por el viejo continente y a sus casi 32 años no se ve claro cuál será su siguiente paso en el mundo del fútbol.

Capacidad por su puesto que tiene, aunque no para ser indiscutible en un equipo top como se le relacionó en un comienzo, pues se hablaba de equipos como el Milan, el Manchester United, el PSG y otros gigantes que se suponía estaban interesados en sus servicios antes de dejar a las Águilas y no el Ajaccio, equipo que finalmente apostó por sus servicios y el cual dejó tras perder la categoría en la Ligue 1 en 2014. Ochoa mismo no pudo quitarle el puesto a Kameni en el Málaga y tuvo que buscarse acomodo en Granada, donde a pesar de ser el mejor jugador del equipo, nada le garantiza que a su regreso al cuadro malagueño cuente con él, lo más seguro es que de nueva cuenta tenga que buscar un equipo donde tener continuidad y donde pueda sentirse valorado.

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Una de las diferencias que tendría su situación a partir de ahora, es que por primera vez podría buscar un nuevo club como comunitario, otro de los temas que frenó que luchara por tener una oportunidad en un mejor equipo en Europa, pues al no tener doble pasaporte, los cuadros se pensaban más su contratación pues ocupaba un puesto como extranjero, y muchos clubes prefieren gastarlos en otras posiciones y no en la portería.

Desde aquí le sugerimos a quien maneja los contratos de Ochoa, que esté atento al Oviedo de Carlos Slim, equipo que hoy está en segunda y que está luchando por ascender a LaLiga para la próxima temporada, un proyecto serio, que de lograr el ascenso seguramente necesitaría refuerzos de calidad y al tener el vínculo mexicano por los dirigentes que manejan sus destinos, puede ser una buena puerta para volver a impulsar su carrera, teniendo más certezas que dudas, en un equipo de tradición que pretende volver a a retomar importancia en España.

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La parte personal es la que mejor ha ido en Europa, su pareja y sus dos hijos están asentados a la vida allá y aunque el portero ha sido tentado en muchas ocasiones para jugar en la MLS, con contratos que fácilmente superarían lo que percibe actualmente, su idea ha sido siempre mantenerse en el fútbol europeo, demostrando que las adversidades no hacen mella en su mentalidad y que está decidido a tener una experiencia diferente a las que ha vivido en los años que le resten por allá, pues se lo merece.

“Muchas veces no se ve lo que el mexicano busca hacer acá, estás en las mejores ligas del mundo, estás jugando ante los mejores, buscando tener la oportunidad de tener minutos, de hacerse un nombre, en México por ahí creen que es muy fácil conseguir equipo. Ya salir de México es difícil no es sencillo para nosotros, pero día con día buscamos sobresalir, la gente que está acá está disfrutando su recorrido en Europa, algunos en grandes equipos, otros no tanto, pero cada uno dando lo mejor”, comentaba Paco Memo justo antes de consumarse el descenso del Granda.

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Qué hubiera sido de su carrera de no haber saltado el problema del clembuterol en México en el 2011, al que se le señala como causante del miedo de muchos clubes de mayor calidad de apostar por su fichaje, ¿dónde estaría hoy Ochoa en el mapa futbolístico? Nunca lo sabremos, pero si está claro que de el par de arqueros mexicanos que se mantienen en la órbita de los equipos de ligas de primer nivel en Europa, casos de Pablo Sisniega en la Real Sociedad y Raúl Gudiño en el Porto, por un mejor trazado y elección de club a futuro.

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