El inolvidable año de Perú finalizó con sabor agridulce

Football Soccer – Peru’s national soccer team training – World Cup 2018 Qualifiers – Lima, Peru – October 1, 2017. Peru’s national soccer team coach Ricardo Gareca shakes hand with national soccer team player Paolo Guerrero during a training session in preparation for their qualifying match against Argentina. REUTERS/Guadalupe Pardo
Football Soccer – Peru’s national soccer team training – World Cup 2018 Qualifiers – Lima, Peru – October 1, 2017. Peru’s national soccer team coach Ricardo Gareca shakes hand with national soccer team player Paolo Guerrero during a training session in preparation for their qualifying match against Argentina. REUTERS/Guadalupe Pardo

El milagro se produjo. Nadie hubiese imaginado a finales del año 2016 que Perú podría meterse entre los cuatro que clasificaban directo al Mundial 2018 en Sudamérica o al menos conseguir el quinto lugar, que finalmente alcanzó.

A la hora de hablar de héroes, Ricardo Gareca se lleva el primer lugar en el podio. El técnico argentino fue el artífice de una remontada histórica para una selección que parecía condenada al fracaso eterno.

Es que Perú no clasificaba a un Mundial desde España 1982. Mucho, demasiado tiempo si tenemos en cuenta que por sus filas, a lo largo de la historia, desfilaron estrellas de alta consideración como Héctor Chumpitaz, Teófilo Cubillas, Ramón Mifflin, Juan Carlos Oblitas, Hugo Sotil, César Cueto, Julio Meléndez Calderón, Percy Rojas, y más contemporáneos Nolberto Solano, Claudio Pizarro, Jefferson Farfán y Paolo Guerrero, del que hablaremos más adelante.

Perú tuvo un 2017 para el recuerdo. Fue el año de la recuperación, del objetivo cumplido.

Había finalizado el 2016 con una derrota casi lapidaria ante Brasil como local por 2 a 0. Ese resultado ensombrecía las ideas a futuro.

Es que Gareca, convencido de que su idea aún tenía vida no bajó los brazos. Motivó a su equipo y a partir del 23 de marzo de 2017, cuando igualó de visitante con Venezuela 2 a 2, inició el camino rumbo a Rusia 2018.

Venció a Uruguay, Bolivia y Ecuador (todos por 2 a 1) de forma consecutiva e igualó con Argentina (0-0) y Colombia (1-1), para quedarse con el quinto puesto que le daba la chance de jugar el repechaje con Nueva Zelanda.Igualó de visitante y ganó de local. El pasaporte estaba sellado. Volvía a un Mundial. La tarea estaba cumplida.

Pero la fiesta no fue completa. Paolo Guerrero, el gran referente del plantel, el ídolo, el goleador, daba positivo en un análisis antidoping realizado tras el duelo ante Argentina en Buenos Aires.

No pudo jugar el repechaje y ya la FIFA lo suspendió por un año. Ahora llega el tiempo de las apelaciones. ¿Tendrá éxito? ¿Podrá dar vuelta la historia o al menos bajar el tiempo y poder jugar el Mundial?

El año inolvidable finalizó con sabor agridulce. Ahora sólo queda esperar y sea como sea dejar su mejor imagen en Rusia 2018.

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