Yahoo Noticias Los cinco bloopers más “destacados” del 2017
Año tras año en cada cierre se suelen recurrir a los sucesos más destacados que sucedieron a lo largo de los 12 meses de acción futbolística.
Y como es costumbre, los bloopers, burradas, jugadas cómicas, desafortunadas o como quieran llamarlas, son parte de estos resúmenes generales.
Fueron muchos los que se dieron en nuestro continente y en todos los ámbitos, ya sean en torneos oficiales como en entrenamientos o partidos amistosos. Todos dejaron algo para el recuerdo. Y para la sonrisa.
Uno de los más recordados por sus consecuencias finales fue sin duda el “golazo” en contra de Arturo Vidal en el duelo entre Chile y Paraguay por la Eliminatoria Mundialista, en el partido que disputaron en el estadio Monumental David Orellano de Santiago de Chiel que ganó Paraguay por 3 a 0 y que fue, sin dudas, uno de los últimos golpes bajos que dejaron a La Roja sin Mundial.
Otro de los bloopers más comentados fue el que protagonizó el portero colombiano David Ospina. Fue en Lima en el empate entre Perú y los Cafeteros 1 a 1 y que le dio al conjunto que dirige Ricardo Gareca la posibilidad de jugar y ganar el Repechaje con Nueva Zelanda que finalmente les otorgó la clasificación al Mundial 2018.
¿Por qué fue una falla histórica? No sólo por la manera en que introdujo la pelota en su arco sino porque el tiro libre era indirecto. O sea, si no la hubiese tocado la jugada era inválida.
Otro gol ridículo fue el que hizo en contra el peruano Kike Rodríguez de Comerciantes Unidos en la derrota de su equipo ante el uruguayo Boston River por las fases iniciales de la Copa Sudamericana. Una burrada insólita…
Parece que este fue el año de los peruanos. En el Torneo de Verano, en un partido entre Academia Cantolao y Ayacucho, Paulo César Albarracín (de Cantolao) batió a su propio arquero Federico Nicosia con esta “joyita”.
Por último, una en Argentina. Fue en un entrenamiento de Boca Juniors cuando el defensor Leonardo Jara le pegó un patadón a Darío Benedetto que no lo lesionó de gravedad de casualidad. Claro que el destino quiso que más tarde, sobre el final del campeonato, el goleador sufrió la rotura de ligamento cruzado que lo tendrá por más de seis meses sin acción.
¿Cuál fue el más gracioso? Eso ya lo dejamos a su elección…
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