Atleta francés no soportó los abucheos y lloró en el podio

2016 Rio Olympics - Athletics - Victory Ceremony - Men's Pole Vault Victory Ceremony - Olympic Stadium - Rio de Janeiro, Brazil - 16/08/2016. Silver medalist Renaud Lavillenie (FRA) of France reacts.   REUTERS/Sergio Moraes  TPX IMAGES OF THE DAY. FOR EDITORIAL USE ONLY. NOT FOR SALE FOR MARKETING OR ADVERTISING CAMPAIGNS.
2016 Rio Olympics - Athletics - Victory Ceremony - Men's Pole Vault Victory Ceremony - Olympic Stadium - Rio de Janeiro, Brazil - 16/08/2016. Silver medalist Renaud Lavillenie (FRA) of France reacts. REUTERS/Sergio Moraes TPX IMAGES OF THE DAY. FOR EDITORIAL USE ONLY. NOT FOR SALE FOR MARKETING OR ADVERTISING CAMPAIGNS.

Es muy común, y hasta comprensible, ver llorar de emoción a los deportistas cuando suben al podio triunfal. Es el momento culmine de un largo trabajo de preparación, de sueños alcanzados, de haber conseguido el objetivo, de estar allí, entre los tres mejores del mundo.

Lo que no es habitual es verlos llorar porque el público local en lugar de aplaudirlos en reconocimiento por sus respectivos logros, les dediquen un largo abucheo en clara muestra de reprobación.

Eso le sucedió al francés Renaud Lavillenie, quien llegó a Río con el record mundial de salto con garrocha y era claro candidato a quedarse con la medalla de oro, la misma que había conseguido en Londres 2012.

Sin embargo no pudo con el brasileño Thiago Braz da Silva, quien lo superó al conseguir una marca de 6,03 metros y así escalar a lo más alto del podio.

Todo comenzó el lunes, durante la competencia, cuando la hinchada brasileña alentaba a su compatriota al tiempo que no cesó de silbar y vociferar en contra del francés.

Una vez finalizada la competencia, en clara muestra de disconformidad con el inaceptable comportamiento de la gente, Lavillenie comparó la situación con la que se vivió en Berlín 1936, cuando los alemanes criticaron y desaprobaron el triunfo del estadounidense Jesse Owens.

Eso generó que este martes, en la premiación, la gente volviera a volcarse en contra del francés, quien lloró en clara muestra de impotencia.

Una vez finalizado el acto, el propio Da Silva se acercó al vestidor del francés para expresarle su apoyo.

A su vez el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, emitió un comunicado repudiando la actitud del público.

“Dolido por el comportamiento del público al abuchear a Renaud Lavillenie en la entrega d ela medalla de plata. Inaceptable en los Olímpicos”

Mientras tanto el propio Lavillenie, ya más calmado, pidió disculpas por la comparación, aunque eso no justifica para nada la inaceptable actitud del público local. Fue claro: "Sin palabras"

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