Ronaldo acaricia el Balón de Oro

Un vuelo sin motor para meter a Portugal en la final de la Euro 2016 puede valer a Cristiano Ronaldo su cuarto Balón de Oro.

El delantero portugués no ha parado de llevarse palos este año, pues no ha estado --según la crítica-- al nivel de otras temporadas, pero a la vez el madridista ha levantado la Champions League, se ha colado en la final de la Euro y ha llegado por sexta temporada consecutiva a batir la marca de 50 goles.

Si además le añadimos el hecho de que esta vez sí ha sido protagonista de los mejores momentos de sus equipos, su candidatura al máximo galardón otorgado a un jugador profesional parece bastante sólida.

Ronaldo fue clave en el Real Madrid tanto en los octavos de final como en los cuartos de la Champions League, cuando sus goles derrotaron a la Roma y dieron la vuelta a la eliminatoria más espinosa ante el Wolfsburgo. Las lesiones no le permitieron brillar ante el Manchester City en semis, y lo cierto es que tampoco lo hizo en la final de Milán ante el Atlético Madrid, aunque no rehuyó la responsabilidad y marcó el quinto gol de la tanda de penaltis de desempate ante los colchoneros, para darle la Undécima a los blancos.

En la Euro no empezó con buen pie. No pudo hacer mucho para evitar que su equipo quedará tercero de grupo, aunque fueron dos goles suyos ante Hungría los que auparon al conjunto ibérico cuando los magiares se adelantaron por partida doble en le marcador. Antes, contra Austria, tuvo la oportunidad de poner la primera piedra en su proyecto pesonal desde el punto de penalti, pero falló y su equipo acabó empatando 0-0.

Ya en la segunda fase, Ronaldo consiguió empezar a convertirse en el deseado líder de Portugal. Secundado por Renato Sanches, en plan superestrella, Cristiano fue el atacante más punzante ante Croacia y, al final, un disparo suyo ayudó a que Quaresma certificara el pase a cuartos en la prórroga. Ante Polonia, el atacante tuvo el gol de la victoria en sus pies varias veces, pero no logró batir a Fabianski hasta la ronda final de penaltis. En esta ocasión, Ronaldo marcó el primero de la tana, poniendo a Portugal en el camino correcto para alcanzar las semis.

Ante Gales, frente a frente con su compañero Gareth Bale, el portugués disputó su mejor partido en el torneo. Estuvo omnipresente en ataque, imparable para la defensa británica, y rozó el gol en varias ocasiones, hasta que en el minuto 60 saltó más que nadie para conectar un cabezazo inapelable, a más de 70 kilómetros por hora, que se coló en el marco galés.

Ese gol puede ser el definitivo en la carrera personal de Ronaldo por levantar el Balón de Oro en enero de 2017. El portugués dijo después del partido que no le interesan los premios individuales y que está en enfocado en llorar "lágrimas de felicidad" con su selección, en alusión a su llanto tras perder en 2004 la final de la Euro ante Grecia.

Llegados a este punto, sólo su compañero Toni Kroos, que también ganó la Champions League y podría llevarse aun la Euro, o Antoine Griezmann, que disputó la final de la Chamions League con el Atlético Madrid, podría colarse también en la final de St. Denis, y lidera la tabla de máximos goleadores de la Euro con cuatro goles, podrían hacerle sombra; pues  Lionel Messi no estuvo presente en las rondas finales de la Champions League este año y perdió la Copa América ante Chile en la definición por penaltis.

Así, aunque Ronaldo lo niegue, su cabeza va a estar bastante pendiente de hacer un buen partido ante Alemania o Francia en la final de la Euro y poder, además de levantar finalmente un título con su selección, llevarse también el que sería su cuarto Balón de Oro.

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