Ya es noticia cuando no marca Ciro Immobile

Ciro Immobile festeja un gol para la Lazio junto a su compañero, el lateral rumano Stefan Radu. (Foto: Getty)
Ciro Immobile festeja un gol para la Lazio junto a su compañero, el lateral rumano Stefan Radu. (Foto: Getty)

La Lazio venció en Génova a esta buena Sampdoria, la misma que hace un par de partidos había desnudado a todo una Juventus, y Massimo Ferrero, el incontinente presidente de los dorianos, encontró una explicación sencilla al asunto: la suerte. “Cuando digo que existe ‘San Culino’ no lo digo por casualidad’, argumentó Ferrero.

La enésima bufonada de Ferrero, además de para echar unas risas, sirve para definir el momento actual de la Lazio. Es el romano el típico equipo que te machaca aun dando la impresión de no hacer nada para conseguirlo. Y el jugador que encarna como ninguno ese estado de forma, aunque no marcase en el asalto a Marassi, es su delantero centro: Ciro Immobile.

No fue el día de Immobile y la buena noticia es que eso es noticia. El mejor nueve de Italia con permiso de Mauro Icardi, arrancó el curso con un doblete a la Juventus que envió la Supercoppa a las vitrinas del estadio Olímpico, ha entregado 15 goles en 14 partidos de liga y 3 más en la inmaculada primera fase de Europa League que han firmado los celestes. Concreto, efectivo y exitoso contra todo pronóstico como el propio proyecto de Simone Inzaghi, así está siendo el curso del killer de Torre Annunziatta.

Immobile fracasó en el Borussia Dortmund y mucho más en el Sevilla. Él es animal de calcio, especie dominante en ese paisaje árido donde brota una flor entre las grietas del asfalto muy de vez en cuando. En el fútbol frontal de la Lazio, Inmmobile se está hinchando a culminar jugadas. Su desmarque central para vivir de lo que proponen Milinkovic-Savic y un Luis Alberto incontenible en el enganche es ya un cromo reconocible en la historia reciente de la Lazio. Como un negativo de esa ciudad enrevesada, de apabullante belleza, la Lazio e Immobile triunfan con un juego simple pero tremendamente efectivo. Tanto que te ganan y parece pura suerte.

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