Yahoo Noticias Luka Modric ocupa el trono del Cristiano Ronaldo
En la final del Mundial 2018 que se disputará en el estadio Luzhniki habrá tres jugadores del Real Madrid, Raphael Varane, Mateo Kovacic y Luka Modric, pero sólo este último tiene a su alcance la posibilidad no sólo de salir campeón del Mundo, sino también de llevarse el primer Balón de Oro de la última década que no vaya a parar a las casas de Cristiano Ronaldo o Lionel Messi.
La temporada del pequeño mago croata ha sido así de impresionante, coronándose campeón de Europa con el Real Madrid con un partido genial para él en lo personal en la final, y luego comandando a su selección de manera impactante durante todo el Mundial, consiguiendo lo impensable: clasificarla para la final ante Francia.
Modric lleva años dejando muy a las claras su clase y su talento por todos los campos de Europa, pero su carácter retraído fuera del césped jamás le ha ayudado a reclamar los focos necesarios para ejercer el lobby con el cuentan Ronaldo, Messi o Neymar de cara a ganar el codiciado Balón de Oro.
Sin embargo ahora, tras su esplendoroso Mundial, y más aun tras la salida de Cristiano Ronaldo del Real Madrid, el croata podrá finalmente sentarse en el trono que ocupaba el portugués en Madrid. Porque la figura de CR7 era tan alargada que lo ensombrecía todo cerca del Bernabéu. Karim Benzema, que llegó como gran estrella a la vez que el portugués, se ha convertido en un buen complemento de ataque, y habrá que ver como se las apaña ahora sin su gran amigo Ronaldo. Gareth Bale, fichado para liderar la transición que se preveía con Ronaldo rondando la treintena, ha acabado por apagarse como gran estrella entre lesiones y malos modos. Ni que hablar de los Isco, Asensio, o el propio Modric.
Cabe recordar que Ronaldo, desde 2009 hasta 2013 no ganó una sola Champions League. Luka Modric llegó por la gatera en 2012, como petición expresa de José Mourinho, que le veía como el mejor recambio de Mesüt Ozil. Tras una primera temporada para nada impresionante, el croata se asentó en el equipo bajo la batuta de Carlo Ancelotti y desde entonces ha ganado cuatro Champions Leagues en cinco años. Desde luego que Ronaldo tuvo mucho que ver en esos títulos, y por eso el peso en el juego del equipo de Luka Modric se ha visto bastante oscurecido por el resplandor del portugués, cuando en realidad debería haber brillado mucho más.
Con la marcha de Ronaldo a la Juventus, Luka Modric podrá por fin reclamar los focos como la gran estrella del equipo. Sin duda el equipo firmará a algún galáctico –llámese Hazard, Neymar o Mbappé–, pero el lugar de Modric en el escalafón de mando del conjunto blanco está ya fuera de toda duda y el cariño que siempre le ha demostrado la hinchada, debería ahora verse refrendado en un papel estelar para la prensa y la crítica.
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