La gran posibilidad de que el Real Madrid no fiche a nadie

REUTERS/Susana Vera
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Los objetivos han ido variando y conforme ha ido pasando el verano los madridistas han ido perdiendo la fé en que el presidente del club, ese “ser superior” que dijo Emilio Butragueño, se saque a algún jugador magnífico de la chistera para hacer soñar a la afición.

Si una vez se marchó Cristiano Ronaldo los nombres de super estrellas que llegarían al Santiago Bernabéu se empezaron a agolpar en las portadas de los diarios, ahora las cosas han cambiado drásticamente. De repente, la prensa afín al club, ha comenzado a hablar de “cambio de estrategia” de “no querer cometer el mismo error que el FC Barcelona” el año pasado tras la marcha de Neymar, y de una nueva “apuesta por la juventud”. Nada de esto obedece a la realidad. Lo único que ocurre es que Florentino Pérez, siempre confiado en sus dotes de negociación, puede haber finalmente tocado en hueso y haber fallado en la aproximación.

El presidente merengue pensaba que las buenas relaciones con PSG y Bayern Munich le abrirían las puertas en las negociaciones por Neymar y Lewandowski, y que luego el deseo de los jugadores haría el resto. No contó Pérez con que el mercado se ha vuelto loco, y si un jugador como Malcolm puede subir su valor de traspaso en un 33% sólo en 24 horas, entonces es normal que los clubes prefieran atar a sus estrellas –por más que éstas estén a disgusto– antes que venderlas, ante la dificultad de encontrar recambios que valgan la pena a precios normales.

Por eso Florentino Pérez ya ha dejado claro que confía en su plantilla y que no piensa hacer ninguna locura por ningún jugador. Esto se traduce en que él se siente capacitado de marcar el ritmo del mercado y no se plantea –por ejemplo– pagar más de 150 millones de euros por Eden Hazard. El Balón de Plata del Mundial está como loco por la música, pensando que dejar un Chelsea que disputará la Europa League este año por el campeón de Europa, al cual llegaría como gran estrella, es un salto cualitativo que no debería dejar de hacer. Pero claro, el Chelsea no piensa dejar salir a su gran baza por menos de 225 millones, y menos cuando sólo tienen hasta el 9 de agosto para encontrar a un jugador de garantías para cubrir el hueco que dejaría tras de sí el belga.

Parece que ahora más que nunca un gran club necesita un departamento de fútbol capaz de recabar informes de un gran número de jugadores y tener plan A, B, C, y los que hagan falta, pues los tiempos de “soy el Real Madrid y ficho a quien quiera” podrían haberse acabado.

Por eso estamos ante el verano en que el Real Madrid podría quedarse sin fichar absolutamente a nadie de relubrón y, en ese caso, no cabría excusa alguna en forma de nota de prensa divulgada por los medios amigos. La realidad nos diría que el equipo habrá pasado de contar tras la final de Cardiff en 2017 con Ronaldo, James y Morata y su plantilla, a no sólo no tenerlos, sino a no contar con ningún jugador que mínimamente pueda cubrir sus vacantes.

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