La Selección Mexicana y las fatalistas críticas por perder un partido irrelevante

La Selección Mexicana no vive uno de sus mejores momentos en años. Cualquier cosa que pueda ser criticada lo será cada que el equipo mexicano falle dentro y fuera de la cancha. La semana pasada, Uriel Antuna fue señalado inesperadamente por tomar mate, una bebida tradicional en Sudamérica y que en el futbol es muy común entre los jugadores; el atacante mexicano simplemente fue criticado por “sentirse sudamericano”. Ahora, después de perder un encuentro que no tenía demasiados beneficios, el equipo nacional fue juzgado hasta el cansancio, pues su afición tiene la percepción de la realidad alterada y exige cosas como si se tratase de la selección campeona del mundo.

México ha tenido un mes de pesadilla. Los ecos de la última Copa del Mundo siguen persiguiendo a un equipo que durante algún tiempo ha navegado sin brújula y con más dudas que certezas. En el último mes, volvieron a caer frente a Estados Unidos, equipo con el que solamente han empatado en una ocasión de los últimos seis enfrentamientos y los demás los han perdido. Ahí no solo dejó ir la oportunidad de quitarse el yugo de ser el vencido, sino que también se derrumbó el proyecto de Diego Cocca como el técnico nacional y la presidencia de la Federación Mexicana de Futbol optó por poner a Jaime Lozano como entrenador interino.

Hasta ese momento, se creía que las cosas comenzaban a mejorar, Lozano es un técnico familiarizado con varios seleccionados y su proceso en la Copa Oro inició de buena forma, imponiéndose a los rivales limitados dentro de la cancha. Sin embargo, para el último partido de la fase regular del campeonato de la CONCACAF, el tricolor sucumbió a manos de Qatar. En el trámite, el equipo mexicano no debió tener mayor complicación para salir victorioso, pero con el panorama a su favor, si perdía o ganaba, ya estaba clasificado a la siguiente fase. Aún así, fue complicado ver al equipo nacional sin una clara idea para definir los partidos cuando el equipo rival cierra hasta el mínimo espacio.

Qatar se fue con la mínima, pero en el seno mexicano se asomaron los fantasmas del torneo en el que esta selección fue anfitriona en diciembre del 2022. Algunos periodistas destacaron que el equipo mexicano careció de carácter y la responsabilidad recae directamente en ellos. Aunque ya era un partido donde ni siquiera todos los titulares participaron. Ya no había ninguna exigencia por ganar ese partido, excepto por la credibilidad de la nueva selección. En los dos encuentros anteriores, los mismos que festejaron los resultados, fueron los primeros que salieron a protestar después de perder el último encuentro.

Por su parte, la afición mexicana, que es fiel a reírse de sus propias desgracias, no tardó en empezar a infestar las redes sociales con memes y chistes en torno a los dirigidos por Lozano. Aquel equipo que adoptó el apodo de “Lamborjimmy”, ahora se convirtió en una chatarra. Para algunos solo recibió un fuerte golpe que lastimó profundamente la carrocería, pero para Lozano se trata de una derrota a tiempo para profundizar en las carencias que tiene el equipo.

“Cuando recibimos el gol es lo que pensamos, ahora es el momento donde se ve realmente lo que somos y el equipo generó, no fue nuestro mejor partido posiblemente, pero no por el resultado sino por el estado final. Creo que lo hicimos más complicado de lo que era y como dicen, y a mí nunca me había gustado ‘una derrota a tiempo’, pero es muy cierta esa frase, porque pierdes la siguiente y te vas a tu casa”, comentó el timonel mexicano.

Es un torneo donde han tenido poco tiempo para practicar, pero el equipo se acopla cada vez más a la idea de Lozano y la situación irá dando sus frutos. Sin embargo, en el contexto actual, los dirigentes del equipo mexicano requieren resultados positivos en un periodo corto y ahora tienen que apostar el todo por la Copa Oro. Este resultado puede servir para aprender de sí mismos o para derribar lo poco que se ha ido construyendo.

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