Yahoo Noticias El adiós de un ícono de la selección uruguaya
No sorprendió la decisión de Diego Forlán de decirle adiós a la selección uruguaya. Tarde o temprano iba a llegar.
De repente muchos pensaron que la próxima Copa América iba a ser el momento de la despedida teniendo en cuenta que Luis Suárez no la puede jugar. No fue así.
Atrás quedan 13 años donde su nombre fue parte fundamental del plantel Celeste. Tres Copas América (2004, 2007 y 2011), tres Mundiales (2002, 2010 y 2014), una Copa Confederaciones (2013) y decenas de presentaciones entre Eliminatorias y amistosos.
Diego Forlán ya es historia. Historia de la buena. Su debut con la casaca de su país se remonta al 27 de marzo de 2002 ante Arabia Saudita. Y ese día anotó el primero de los 36 goles con que cerró su marca.
Ese mismo año jugó su primer Mundial. Fue en Corea-Japón siendo clave en la famosa remontada ante Senegal. Uruguay iba perdiendo 3 a 0 y tras su ingreso en el segundo tiempo alcanzaron el empate a tres con una anotación suya. Sin embargo quedó eliminado en la primera ronda.
Muchos fueron los goles importantes de Forlán y, sobre todo, sus logros. Pero si hay que destacar uno, fue el que le hizo a Holanda en el Mundial 2010, donde Uruguay finalizó cuarto y él ganó el Balón de Oro al Mejor Futbolista del torneo.
En cuanto a títulos, Diego Forlán se dio el lujo de alzar la Copa América 2011 en Argentina, país donde debutó en primera división a los 18 años defendiendo la camiseta de Independiente luego de hacer las divisiones inferiores en Peñarol y Danubio de su país.
Un dato final importante y que lo identifica. Diego Forlán viene de una familia de campeones. Su abuelo materno Juan Carlos Corazzo fue campeón de la Copa América (en aquel momento el torneo de llamaba Campeonato Sudamericano) en 1959. Su padre Pablo fue campeón en la edición 1967 siendo el director técnico de esa selección nada menos que el propio Corazzo.
Sin dudas la sangre tira y Diego la llevó y la dejó en la cancha cada vez que se calzó la Celeste, la que llevará por siempre en su corazón.
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