Regatea a todo el equipo desde el saque inicial, anota y gana el partido

Tremendo. Elliott Durrell anotó un golazo digno de las mejores jugadas de videojuego, modo arcade total, durante el encuentro que disputó su equipo, el Hednesford Town contra el Bradford Park Avenue el pasado fin de semana. Con 1-1 en el marcador y apenas unos segundos para que el árbitro pitara el final en este encuentro de la Conference North inglesa, el delantero arrancó en serpentineo imparable desde el mismo saque de centro hasta plantarse frente al meta rival para batirlo y ganar el partido. Como suele ocurrir cuando la agarran tipos como Messi o Maradona, en el camino quedó tirado todo el equipo rival.

Es maravillosa la habilidad de Durrell para conducir magistralmente la pelota en un campo tan embarrado e irregular y su valentía para animarse ni siquiera a pensar que esta jugada pudiera ser posible. Sin duda uno de los mejores goles en lo que llevamos de año.

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