Sin Busquets no hay paraíso

Después de la partida de Xavi a Medio Oriente y de las lesiones recurrentes de Iniesta, la figura de Sergio Busquets se hace cada vez más grande. Sin él, el Barcelona dista mucho de ser un equipo fluido y elegante.

El arte del perfil bajo

Sergio Busquets es la figura clásica del antihéroe, silencioso, poco mediático, no tiene cuentas en redes sociales, no aparece como imagen publicitaria de grandes marcas, no es un galán apetecido. Mantiene un bajo perfil absoluto dentro y fuera de la cancha. Busquets, apegado a su función en el campo, hace su trabajo de manera impecable y se marcha a casa sin aspavientos.

Cuando Busquets está en la cancha el fútbol fluye en el Barcelona, hay orden, se cometen pocos errores, la doble función de marca y generación de juego se cumple a la perfección. Cuando no está, como el fin de semana anterior en el deslucido partido del cuadro blaugrana en casa frente al Granada, el caos reina en el terreno de juego. El equipo depende exclusivamennte de la pegada de Messi, Suárez y Neymar.

El equilibrio

Vimos al mejor equipo de la historia, el Barcelona de Guardiola, con una zona de volantes que tenía a tres genios en su máximo nivel; hoy no está Xavi e Iniesta ha iniciado su declive. Por esta razón, el ancla del equipo es fundamental para mantener un concepto fundamental en el fútbol: el equilibrio.

El equipo de hoy es mucho más vertiginoso, hay menos elaboración, se pasa mucho más rápido de defensa a ataque, la contra y el pelotazo ya hacen parte del repertorio; en aquel equipo, el de Guardiola, la línea fundamental era la del medio campo, hoy es el ataque, por esto es fundamental contar siempre con un seguro de vida que garantice el equilibrio. Ese hombre es Busquets.

Un jugador fundamental

Poco importa que no tenga marketing, es irrelevante que no aparezca como candidato para ganar el Balón de Oro, Sergio Busquets es el mejor volante del fútbol mundial, campeón del mundo y de Europa con la Roja, campeón de todo con el Barcelona; sin su aporte el club blaugrana está condenado al fracaso, urge tenerle en el campo a su mejor nivel.

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