Amigos y profesionales

Amigos y profesionales

Cristiano Ronaldo no soportó y explotó; con su estilo habitual mezcla de soberbia y sinceridad, tuvo palabras y gestos descalificadoras provocadas por otro gesto mágico del pequeño dictador.

Messi amarga a Cristiano

La relación entre Cristiano Ronaldo y la prensa nunca ha sido miel sobre hojuelas, en la rueda de prensa previa al partido de Champions League que enfrenta al Real Madrid a la Roma, vivimos el enésimo capítulo de esta larga historia de amor y odio.

Tengo claro que este es el blog del Barcelona, no escribo desde la ignorancia de mi deber, no piensen que esta columna está dedicada al onceno de Chamartín y el goleador luso; toda esta antesala tiene una justificación, y el argumento es irrebatible, tiene nombre propio y es el mejor jugador del mundo.

Debe ser demasiado complicado ser muy bueno, muy guapo y muy rico, y que un sudamericano de corta estatura, sin porte de actor de Hollywood y con un aire de genio autista te amargue la vida cada semana.

El penal de la discordia

Después del penal que convirtió un domingo cualquiera en un domingo inolvidable, como bien lo definió Valdano, las noches de Cristiano no debieron ser muy plácidas, comerse los titulares de la televisión y las portadas de la prensa mundial con su enemigo natural como dueño del cartel protagónico debió haberle desvelado.

En el fondo yo le entiendo, tiene que ser un sentimiento cancerígeno anotar tres goles y que al siguiente día el enano marque cuatro, ganar un Balón de Oro y que el otro gane dos, tener dos Champions y que el genio tenga cuatro. Ese trago amargo y sin anestesia tiene que ser casi imposible de digerir.

Además si tienes la personalidad del portugués, la dificultad aumenta, porque si eres un Iniesta que va por la vida con otros aires, te haces el desentendido y dejas que tus acciones hablen por tí, y que la historia se encarguue de juzgar. Así es la vida, hay personas que son felices cuando gana el equipo, otros prefieren que el grupo pase a segundo plano, que no gane nada, pero si se llevan la estatuilla individual a casa, esa es la felicidad.

Acusaciones tácitas

Temas para el análisis de un sicólogo o un sociólogo. Lo cierto es que Messi desató la furia de Cristiano una vez más, y el luso quedó en evidencia de nuevo. Esa frase en tono destemplado: "tengo claro porque Messi cobró el penal así, pero no te lo voy a decir", retumbó en el planeta.

La acusación tácita con la que pretende inculpar al genio rosarino, como el fraguador de un complot para dejarle sin su juguete individual de la temporada, hablo del Pichichi, es una demostración más de la personalidad egoista de Cristiano Ronaldo.

GRA310. BARCELONA. Leo Messi lanza el penalti que remata Luís Suárez ante el Celta de Vigo. EFE/Quique García
GRA310. BARCELONA. Leo Messi lanza el penalti que remata Luís Suárez ante el Celta de Vigo. EFE/Quique García

Yo le preguntaría, acaso Benzema no ha dejado de marcar medio centenar de goles para que el luso se convierta en goleador legendario del Real Madrid?

Si Messi le sirve asistencias a Luís Suárez para que su compañero se convierta en goleador, no es esa la razón del juego? buscar que tu amigo gane y que el enemigo pierda.

 

Lleva mucha razón CR7 al explicar que no hay que ser amigo de tus compañeros de equipo para ser ganador, es indiscutible su tesis que habla de profesionalismo sin importar la amistad fuera de la cancha, pero habría que decirle al goleador del Real Madrid, que ganar en un grupo de amigos, que además son grandísimos profesionales aumenta la satisfacción, la producción y la recompensa.

Las cosas que hay que escuchar en estos días del fútbol de redes sociales.

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