Cristiano Ronaldo hace saltar las alarmas

El día que el equipo demostró a Carlo Ancelotti que puede jugar al fútbol sin el freno de mano echado, Cristiano Ronaldo hizo saltar las alarmas en los primeros minutos de la segunda parte.

El portugués, que había marcado el primer gol del partido --el único hasta ese momento-- y rozado el segundo en un par de ocasiones, se deshizo de su marcador en la banda izquierda y mandó un centro pasado al que no llegó Benzema a rematar. Inmediatamente después pidió el cambio.

Se temió lo peor en el cuerpo técnico del Real Madrid, y las caras de los responsables del equipo delataban el miedo a que una rotura muscular de Ronaldo dejara al equipo huérfano de sus goles y su empuje con toda la temporada por delante.

Jesé entró por el portugués y el partido siguió su rumbo. Una goleada, 0-5, de fácil factura y que no fue más por las grandes paradas de Esteban a sendos tiros de Bale y Casemiro, y por otras pifias de Benzema y Bale. Sin embargo, el semblante en el banquillo había cambiado, todos esperaban noticias del equipo médico, para ver como se encontraba Cristiano.

Finalmente, llegó la comunicación: "Ronaldo está bien, se trata sólo de un 'bocadillo'. La típica contusión muscular después de un golpe".

Ancelotti volvió a respirar, a disfrutar del juego ofensivo de su equipo en el que, a parte de Jesé, marcaron todos los efectivos de ataque del club, y empezó a preparar en su mente el encuentro ante el Galatasaray por la Champions League.

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