Wimbledon: Andy Murray se despidió después de una auténtica maratón y Guido Pella hizo todo lo que pudo

Dos días, casi cinco horas. Una maratón emotiva, de punta a punta. Uno de los últimos grandes sigue dando pelea en la Catedral. ¿Habrá sido su última vez? El griego Stefanos Tsitsipas, el villano, quinto tenista del mundo, remontó y terminó ganando en cinco sets sobre el británico Andy Murray, héroe en la derrota (ex número 1, actualmente 40º), este viernes en la segunda etapa de Wimbledon.

El partido comenzó el jueves y fue interrumpido por la norma que obliga a finalizar el juego antes de las 23, cuando Murray acababa de ponerse dos sets a uno en ventaja. El duelo se reanudó este viernes y Tsitsipas ganó dos sets y el partido por 7-6 (7-3), 6-7 (2-7), 4-6, 7-6 (7-3) y 6-4. El griego de 24 años se medirá en la tercera rueda con el serbio Laslo Djere (60º). ”Nunca es fácil jugar contra Andy. Aquí todo el mundo lo ama y su nivel de juego me impresiona”, declaró Tsitsipas ante el público antes de abandonar la cancha central.

Tsitsipas fue subcampeón en el Abierto de Australia (2023) y en Roland Garros (2021), pero en Wimbledon nunca superó los octavos de final, instancia que alcanzó una sola vez (2018). Murray, de 36 años, conquistó Wimbledon en dos ocasiones (2013 y 2016) y se colgó allí la medalla dorada olímpica en 2012. Brotan las ovaciones para uno de los últimos grandes guerreros del circuito, que convirtió a la defensa en un arte.

“Ahora estoy muy decepcionado. Nunca sabés cuántas oportunidades vas a tener de volver a jugar aquí. Las derrotas se sienten más duras, pero en cada año que Wimbledon no fue como yo quería, asumirlo fue duro”, comentó el británico, que sufre el transcurrir del tiempo. La cadera, las lesiones y más allá. “Independientemente del ambiente, sigue siendo muy decepcionante estar aquí sentado en este momento”, reconoció en la sala de prensa después de recibir una de las aclamaciones mayores de su vida. Entonces, un cronista le preguntó qué sería de su vida el año próximo.

“No lo sé: la motivación juega un gran papel. Seguir teniendo derrotas tempranas en torneos como éste no ayuda. Es similar al año pasado. Lo pensé mucho, hablé en familia y decidí continuar. No pienso parar ahora, pero tardaré en superar este resultado. Espero encontrar esa motivación de nuevo para seguir entrenándome y mejorando”, advirtió, con una fuerte sensación de nostalgia.

Pese a contar con el apoyo del público, no logró terminar el trabajo que había dejado avanzado un día antes. Quedó en la puerta, en la segunda rueda. Por cierto, no frente a un rival menor. ”Cuando yo era más joven le miraba por televisión, y cuando él ganó aquí se me puso la piel de gallina. Y ahora, mirá...”, apuntó Tsitsipas sobre sus sensaciones por haber superado a uno de sus ídolos en el court principal del All England Tennis Club, al cabo de 4 horas y 40 minutos de batalla.

En otra cancha, el bahiense Guido Pella perdió ante el ruso Roman Safiullin por 7-6, 6-4 y 6-0, pero ya en la tercera rueda, y entonces no quedan representantes argentinos en el tercer certamen de Grand Slam de la temporada.

Pella, que accedió al cuadro principal merced a su puesto de ranking protegido, jugó durante una hora y 46 minutos y no consiguió torcerr el desarrollo contra el incisivo Safiullin, 92º del mundo. El ex campeón de la Copa Davis, de 33 años, venía de triunfos resonantes sobre el croata Borna Coric y el francés Harold Mayot que le implicaron un importante desgaste físico, esfuerzo que terminó pagando con la amplia derrota de este viernes.

Wimbledon ya no tiene tenistas argentinos luego de las eliminaciones a Federico Coria, Francisco y Juan Manuel Cerúndolo, Diego Schwartzman, Sebastián Báez, Tomás Etcheverry y Pedro Cachin, en la rama masculina, y Nadia Podoroska, en la femenina.

En tanto, el número 1 del ranking de varones, el español Carlos Alcaraz, venció al francés Alexandre Müller por 6-4, 7-6 y 6-3 y sigue en carrera, aunque con algunas dificultades más que las previstas. El murciano necesitó de dos horas y 33 minutos para doblegar al 84º tenista del planeta. Su rival de este sábado será el chileno Nicolás Jarry (28º), que vive una nueva primavera.