Vinícius, Antony, Cunha... La nueva hornada de jóvenes pide paso en Brasil

Sao Paulo, 17 nov (EFE).- Más alegría, más verticalidad y más emoción. La nueva generación de jóvenes brasileños ha irrumpido en esta ventana FIFA dispuesta a tumbar la puerta de la titularidad en la selección absoluta, ya clasificada para el Mundial de Catar 2022.

Vinícius Júnior, Antony, Matheus Cunha y otros futbolistas un poco más asentados en las convocatorias, como Lucas Paquetá y Raphinha, han demostrado al técnico Tite que puede contar con ellos para la cita mundialista del próximo año.

Savia nueva para revertir la imagen de un equipo por veces timorato que durante todo el año ha sufrido duras críticas de aficionados y comentaristas por su estilo de juego gris, pese a sus buenos resultados.

Y eso que la Canarinha se está paseando en las eliminatorias suramericanas. Sigue sin conocer la derrota después de 13 partidos, con un balance de 11 victorias y 2 empates.

Además, certificó su billete a Catar el jueves pasado tras ganar a Colombia por un ajustado 1-0, entonces con seis partidos aún por disputar, y superó con nota su duelo ante Argentina, en el estadio San Juan del Bicentenario.

Sin embargo, faltaba recuperar ese juego ofensivo vistoso, anárquico e imprevisible que caracteriza a la pentacampeona del mundo.

Tite, un amante del rigor defensivo y poco dado a grandes revoluciones, se ha visto obligado a revisar sus postulados y dar paso a los jóvenes, muchos de los cuales vienen con la vitola de campeones olímpicos tras colgarse el oro en los Juegos de Tokio 2020.

El partido ante Colombia parecía abocado a un 0-0 hasta que el técnico dio entrada en la segunda mitad a Vinícius, del Real Madrid, y Antony, del Ajax.

Ambos forman parte de la generación 2000, sobre la que se viene hablando en Brasil desde hace algunos años por su desparpajo con la pelota.

Su presencia en el Neo Química Arena de Sao Paulo revolucionó el encuentro. Abrieron el campo, desbordaron y dejaron más espacio en el centro a Neymar y Paquetá, quien rompió la igualdad con un remate de primeras a pase del atacante del París Saint-Germain.

"Quiero seguir así, quiero seguir teniendo minutos. Lo importante es estar a la altura de Tite", declaró Vinícius tras el pitido final.

El extremo, que ha tenido un arranque de temporada deslumbrante con el Real Madrid, donde, hoy por hoy, es titular indiscutible, curiosamente sólo fue citado por el seleccionador después de que se confirmara la lesión del delantero del Liverpool Roberto Firmino.

Sin Neymar 'tocado' por unas molestias musculares, Vinícius fue titular contra Argentina, en un tridente que completaron Raphinha (Leeds United), que parece haberse adueñado del extremo derecho de la selección, y Matheus Cunha, de 22 años y jugador del Atlético de Madrid.

El once ante la Albiceleste, a priori el rival más fuerte, fue el más joven que puso en liza Tite en estas eliminatorias mundialistas, con una media de 26,5 años.

Pese a la falta de experiencia en grandes citas con la absoluta, Vinícius, Cunha y Raphinha (24 años) no se amilanaron, todo lo contrario.

El combinado verde-amarillo controló menos el balón y tuvo pocas oportunidades claras de gol, pero los tres de arriba fueron un auténtico dolor de cabeza para la zaga del cuadro de Lionel Scaloni, en un partido de alta tensión.

Nicolás Otamendi le soltó un codazo a Raphinha por el que le tuvieron que dar cinco puntos en la boca.

Vinícius se inventó después una 'lambretta' en el rincón del córner para zafarse de Nahuel Molina y asombrar a medio mundo con la espectacular maniobra. Cunha también cumplió fijando los centrales y dio muestras de su portentosa zancada.

Al final, Brasil no pasó del empate sin goles en San Juan, pero quedó la sensación de que tiene varios ases en la manga para Catar 2022.

Esta nueva hornada de jóvenes se examinará de nuevo el 27 de enero a domicilio ante Ecuador y después contra Paraguay el 1 de febrero en el estadio Mineirao de Belo Horizonte, si Tite renueva su apuesta por ellos.

Carlos Meneses

(c) Agencia EFE