Turismo Carretera: el desembarco de Toyota alienta al cambio y el debate para la próxima temporada

Los cambios provocan, como primera expresión, rechazo y alientan al debate. La tradición y la evolución quedan expuestas cuando se trata de innovar, romper moldes. La Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) tomó una decisión histórica y aprobó el pedido de Toyota Argentina para incorporar al Turismo Carretera al modelo Camry, a partir de la próxima temporada. En 2022, la categoría récord del automovilismo mundial, que cumplió 84 años, presentará cinco marcas, algo que no sucede desde 1981, cuando a Ford, Chevrolet, Torino y Dodge se le sumó Peugeot.

Con el desembarco, el fabricante japonés amplía su presencia en las categorías del automovilismo nacional: con estructura propia compite en el Súper TC2000, el Top Race V6 y el Rally Argentino, mientras que con un equipo satélite batalla en el Turismo Nacional; el primer paso para insertarse en los campeonatos de la ACTC fue en 2020, cuando se sumó al TC Pick Up con la Toyota Hilux, que el reciente fin de semana marcó el 1-2 con los pilotos Andrés Jakos y Mariano Werner en la carrera que se desarrolló en el autódromo Roberto Mouras, de La Plata. La aprobación podría generar, además, el retorno de Matías Rossi al TC: el campeón de 2014 y piloto oficial de Toyota Gazoo Racing Argentina dejó de participar en 2019.

El pedido fue aprobado por unanimidad en la reunión de comisión directiva de la ACTC que se realizó anteayer y comunicado 24 horas más tarde. Ahora será el momento en que el departamento técnico, que lidera el ingeniero Alejandro Iuliano, entrará en acción para equilibrar el rendimiento que pudiera ofrecer el modelo Camry con los Ford Falcon, cupé Chevy, Torino 380W y el Dodge GTX. Equiparar el potencial aerodinámico del modelo de Toyota -diseñado en el túnel de viento-, y que resulta superior al perfil de las cuatro marcas que compiten en la actualidad será un reto para los técnicos. El taller de los hermanos Jakos atendería los autos que serían impulsados por motores multiválvulas Cherokee.

Rubens Barrichello y su Camry del Toyota Gazoo Racing Argentina; con el desembarco de la marca japonesa el Turismo Carretera podría recuperar la presencia de Matías Rossi (Archivo / Emiliano Politano / Toyota Gazoo/)

“No habrá cambios en los modelos actuales a corto plazo, solo se incorpora el Camry. En algún momento hay que empezar a aggiornarse, como fue cuando empezó la transformación del TC hace 50 años”, señaló Christian Ledesma, piloto de Chevrolet campeón en 2007 e integrante de la CD. “Hay que evolucionar. Al comienzo va a costar acostumbrarse al cambio, pero la evolución es necesaria”, comentó Facundo Ardusso -el parejense es el puntero de la Copa de Oro- a Campeones.

El TC sufrió una gigantesca metamorfosis desde su primera carrera, el Gran Premio que tuvo inicio el 5 de agosto de 1937. Algunas modificaciones resultaron significativas, al punto de cambiar la fisonomía de la categoría. La primera transformación a gran escala se produjo en la década del 60 y José Froilán González estuvo detrás de esa jugada que alteró el paradigma: el arrecifeño fue el encargado de innovar con el Chevitú, auto que manejó Jorge Cupeiro. La aparición de los primeros autos compactos fue suplantando a las cupecitas y la reacción de los fanáticos fue de rechazo. “Desde los costados del camino el público nos tiraba botellas, estaban en desacuerdo con el cambio”, repetía Cupeiro, sobre aquella aventura que terminó por imponerse: fue el desencadenante de futuras innovaciones.

Oscar Gálvez marca el rumbo; el Turismo Carretera abrió caminos con las cupecitas

Aldo y Reinaldo Bellavigna fueron los responsables técnicos de la revolución de los autos de General Motors en 1964. Torino, con Oreste Berta y Heriberto Pronello como líderes, se sumó a la nueva era y con Eduardo Copello y Héctor Gradassi marcó el 1-2 en 1967. Ford, tras siete años sin coronas, recuperó el título en 1968, con los autos creados por Horacio Steven, quien diseñó el Trueno Naranja que popularizó Carlos Alberto Pairetti en 1968.

Con el Sport Prototipo en 1969 y los campeonatos paralelos de 1970 -el TC se dividió en Fórmula A, reglamento para correr en la ruta, y Fórmula B, carreras en caminos de montaña o autódromos-, decantó cómo se conoce ahora a la categoría y su póquer de marcas clásicas: Ford, Chevrolet, Torino y Dodge. El 20 de septiembre de 1981, en el autódromo de Buenos Aires asomó Peugeot, con un 504 TN; un mes antes, en la Vuelta de Pergamino, participó sin éxito Fiat, con el modelo 125 que estaba preparado para el TC2000.

Emilio Satriano, Roberto Mouras y Oscar Castellano, en una largada en un circuito semipermanente en los años 80

De los caminos abiertos a los semipermanente de asfalto y de ahí a los autódromos. La quita del acompañante en 2007, los cambios en las estructuras -iguales para todas las marcas- y la irrupción de los motores multiválvulas que en 2015 reemplazaron a los tradicionales varilleros... La llegada del Renault Sport Torino Team en 2017. También otros proyectos quedaron en stand-by, como el de las trompas originales para las cuatro marcas, una idea que comenzó en 2010 se llevó al taller el año pasado, pero que no vio la luz verde.

Con tres carreras para del desenlace del campeonato 2021, la ACTC aprobó el desembarco de Toyota en el TC. Una decisión que abrió el debate y desató alguna polémica entre los nostálgicos, pero una innovación para modernizar la categoría y hacer sustentable el negocio.