Tokio 2020: el objetivo cumplido de Santiago Álvarez Fourcade con el bronce en el rugby

Santiago Álvarez Fourcade, arrodillado, todavía no puede creer que la Argentina haya ganado la medalla de bronce; Santiago Mare (10) se acerca a abrazarlo.
Santiago Filipuzzi

Objetivo cumplido para Santiago Álvarez Fourcade y el resto del equipo de Pumas 7s. Habían ido a Tokio 2020 con la misión de lograr una medalla. Y se irán de la Villa Olímpica con retazos de una hazaña y el bronce en el pecho. Todo, pese al ranking, que los condenó al grupo de la muerte, donde arrancaron con una sorpresiva victoria ante Australia y una goleada a Corea del Sur.

Los Pumas 7s posan con la medalla de bronce, la primera para la delegación argentina en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Santiago Filipuzzi


Los Pumas 7s posan con la medalla de bronce, la primera para la delegación argentina en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. (Santiago Filipuzzi/)

En el medio, derrota con los All Blacks y más tarde, el partido épico con Sudáfrica. Luego, ya en la búsqueda de una presea, la caída con Fiji y la emoción descontrolada tras el triunfo ante Gran Bretaña. Una montaña rusa de emociones que terminó con el tercer escalón del podio y el himno argentino sonando por primera vez durante una coronación en tierras japonesas. La hazaña deportiva incluyó al capitán sentimental del equipo, Gastón Revol, mirando el partido en las tribunas por las cuatro fechas de suspensión que recibió tras el partido con Sudáfrica. Álvarez Fourcade, su sucesor desde hace una temporada dentro de la cancha, procuró que su ausencia no se notara. Y lo consiguió.

El capitán de los Pumas 7s, Santiago Álvarez Fourcade, con LA NACION

Después de los festejos en la cancha y en el vestuario, los Pumas 7s tuvieron su baño de gloria con otra celebración. Al ingresar en el sector de la Villa Olímpica reservado a los argentinos, los jugadores fueron vitoreados y ovacionados por sus colegas albicelestes. Algo parecido a lo que fue el pasillo para Paula Pareto luego de su despedida del judo hace casi una semana. Esta vez, lo hicieron para celebrar una medalla.

Los Pumas, a pura celebración
BEN STANSALL


Los Pumas, a pura celebración (BEN STANSALL/)

Uno de los que estuvo en el centro de la celebración fue el bahiense Álvarez Fourcade, quien se vino desde su ciudad a San Isidro para jugar en el CASI, fue importado del rugby de 15, lo convocaron para una selección de Seven de la URBA y ahí está: nave insignia de los 7s que hoy hicieron historia al ser bronce en el segundo Juego Olímpico de la disciplina.

Rugby seven Los Pumas vs Gran Bretaña por la medalla de bronce en el estadio de Tokio. Triunfo y medalla de bronce para el equipo nacional.
Santiago Filipuzzi


Rugby seven Los Pumas vs Gran Bretaña por la medalla de bronce en el estadio de Tokio. Triunfo y medalla de bronce para el equipo nacional. (Santiago Filipuzzi/)

“Vamos a jugar por una medalla y a dar todo para llegar lo más alto posible. Sabemos que hay muchas cosas para hacer si queremos resultados”, había adelantado Álvarez Fourcade en una charla con LA NACION desde Tokio. Y añadió: “Me gustaría que estemos concentrados, enfocados, conectados entre nosotros. Que podamos encontrar una regularidad en el juego, algo que nos cuesta bastante. Solemos tener un buen partido y al siguiente bajamos la intensidad. Por eso el foco está puesto ciento por ciento en lo que generemos en el plantel”.

En otro apartado de la entrevista, Álvarez Fourcade también habló de la rareza que entraña Tokio 2020, un Juego Olímpico entrecruzado por la pandemia, los protocolos sanitarios y los hisopados constantes. “El Covid-19 llenó de inquietudes a todos. Nos cargamos de incertidumbre, no sabemos qué puede pasar mañana. Se le suman los protocolos, las cuarentenas, los aislamientos. Pero tratamos de manejarlo y que eso no me cambie la forma de entrenar o la intensidad. Es algo que está ahí, hay que adaptarse y hay que sacarlo adelante. Sin dudas que son unos Juegos Olímpicos raros por lo estrictos”. Contra todo y contra todos, ahí estuvieron los Pumas 7s, con Álvarez Fourcade como capitán. Y le dieron a la Argentina su primera gran alegría.