Sumo susto se dieron los caballos, un luchador los estaba esperando

Varios de los caballos que se aproximaban al obstáculo número 10 reculaban y mostraban signos de temor. La espalda de un luchador de sumo japonés los desconcertó y les hizo perder puntos importantes en la clasificación olímpica de salto individual.

Años de entrenamiento para evitar que los caballos se asusten se fueron al traste. La espalda del luchador se sumo acabó con los sueños olímpicos de varios saltadores ecuestres.

"Cuando te acercas, ves el (trasero) de un tipo grande", dijo el británico Harry Charles en declaraciones que recoge la Associated Press. "Hay mucho que ver", agregó el irlandés Cian O’Connor. "Es muy realista", se hizo eco de Teddy Vlock de Israel.

Los jinetes hacían referencia a un luchador de sumo de tamaño natural que fue colocado junto al décimo obstáculo en el recorrido olímpico de 14 saltos y al que varios señalan de la distracción de sus caballos

Algunos incluso se detenían completamente frente a la barrera cuando veían el calzón o mawashi del luchador. Esto les hizo perder varios puntos de penalización para clasificar a la final.

La imagen del luchador se sumo encorvado y listo para atacar fue ubicada a la izquierda del obstáculo número 10. Cuando los caballos daban el giro para buscar ese obstáculo lo primero que observaban era la espalda de la estatua del luchador.

"Me di cuenta de que cuatro o cinco caballos realmente se asustaron con eso", indicó Charles.

La mayoría de los obstáculos de la arena están decorados con un toque claramente japonés: kimonos de geisha, un palacio japonés en miniatura, tambores taiko, pero ninguno llamó tanto a atención de los equinos como el luchador de sumo.

Entre los caballos que se asustaron al ver la imagen se encontraba el de la francesa Penelope Leprevost, medallista de oro en salto por equipos en 2016. Ella no esta segura de si la imagen perturbó la concentración de su semental de 12 años, Vancouver de Lanlore.

"Tal vez. Intentamos relajar a nuestros caballos en la curva y tal vez se sorprendieron al ver una vertical tan cerca. No sé", indicó.

Vlock se ubicó en la posición número 34 en las primeras prácticas y después de ver que otros tenían problemas con la figura del luchador, él y su entrenador se propusieron hacer trotar a sus caballos hasta el décimo salto antes de comenzar sus carreras para que los animales pudieran mirarlo y perdieran el miedo.

"Es muy realista", dijo Vlock. "Parece una persona, y eso es un poco espeluznante. Ya sabes, los caballos no quieren ver a un hombre que los mira intensamente al lado de un salto, luciendo como si estuviera listo para pelear contigo".

Vlock superó el obstáculo sin problemas, aunque tuvo otras dificultades que lo hicieron quedarse corto en la clasificación.

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