Sergio Checo Pérez superó a Charles Leclerc para ganar la carrera sprint en el Gran Premio de Azerbaiyán. El Checo comenzó segundo detrás del piloto de Ferrari y lo sobrepasó en la vuelta ocho en Bakú para finalizar con 4,4 segundos de ventaja.

Max Verstappen terminó tercero, un lugar por delante de George Russell de Mercedes, con quien había protagonizado una lucha en el comienzo de la carrera que dejpo como saldo algunos daños en el monoplaza del campeón.

Leclerc reclamó su segunda pole position del fin de semana el sábado y comenzó la carrera de 17 vueltas con una escapada inteligente para mantener a raya a Pérez. Verstappen era tercero en la parrilla, pero se enfrentó con un Russell que arrancó rápido como compañía en la primera curva.

El neerlandés logró mantenerse al frente antes de que Russell sintiera otra oportunidad en la segunda curva con una maniobra peligrosa que derivó en un toque entre los competidores, y de Verstappen con la pared. “Me tocó. Así consiguió el puesto, denúncialo", expresó el de Red Bull.

“¿Realmente me golpeó a un lado? No entiendo cómo puede dañar mi auto y mantener la posición. Lo encuentro ridículo”, agregó Verstappen, que no tardó en quitarle el puesto a Russell, aunque no llegó a superar a Leclerc y finalizó tercero.

"Ha estado bien, con estas sesiones tan complicadas ha habido mucha presión. El principal objetivo era conseguir el máximo número de puntos. Mañana la pista será distinta, hoy es un buen aprendizaje. Mañana salir tercero no es ideal, pero lo intentaremos todo", declaró Checo Pérez después de la victoria.

Por su parte, Leclerc comentó: "No podemos cambiar el coche, pero confirma lo que pensábamos: los Red Bull tienen un gran ritmo de carrera. Todavía no estamos donde queremos, pero hay que recordar lo lejos que estábamos hace dos semanas. Quería mantenerme en el DRS de Checo, pero no ha sido posible".

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