Sebastián Báez, con LA NACION, tras ganar su primer título ATP: “Hace una semana estaba con poca confianza, pero cambié la energía”

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El festejo del campeón: el argentino Sebastián Báez logró su primer título ATP, en el Estoril Open.
Estoril Open

Sebastián Báez confiesa que su escenario, hace sólo una semana, era totalmente opuesto, al menos desde lo emocional. Después de disputar la final de Santiago de Chile (su primera de ATP) y de debutar con personalidad en la Copa Davis, acarreó más bofeteadas que caricias. Prontas eliminaciones en Indian Wells, Phoenix, Miami y Barcelona, además de una dolorosa derrota la primera ronda de Montecarlo en un partido que pudo haber ganado (caída en tres sets ante Pablo Carreño Busta), lo sacudieron, pero no lograron sacarlo de foco. Convencido del trabajo que realiza desde hace años junto con su equipo, siguió adelante, intentando; y este domingo, en Estoril, cerró un círculo, logrando su primer título en el circuito.

Sebastián Báez, "mordiendo" a lo Rafa Nadal, el trofeo de campeón del ATP de Estoril.
Estoril Open
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Sebastián Báez, "mordiendo" a lo Rafa Nadal, el trofeo de campeón del ATP de Estoril. (Estoril Open/)

Todavía se le advierte la emoción en la voz a Báez (21 años) cuando atiende el llamado de LA NACION desde las entrañas del Clube Ténis Estoril, escenario del certamen portugués con 597.900 euros en premios. Acaba de vencer al estadounidense Frances Tiafoe en la final (6-3 y 6-2) y de celebrar, cual si fuera un chico más y a los saltos, con los alcanzapelotas en medio del court. Disfruta de lo logrado ahora, pero no pierde de vista lo que pasó ayer. Esa particularidad lo hace valorar el proceso y sacar conclusiones; de lo bueno y de los puntos a perfeccionar.

“La semana pasada estaba en una situación diferente, porque venía de perder en primera vuelta en varios partidos, con poca confianza , tenía que tratar de empezar de nuevo otra semana… Fueron momentos complicados y de tensión. Es más: en mi primer día en Estoril ni me imaginaba ganar el torneo. Estaba contento de ganarle a (Joao) Sousa [en la primera ronda]. Pero empecé a buscar más y más. Ganar el título es el reflejo de mucho trabajo que hay atrás, porque no es casual”, cuenta Báez, el 33° argentino en coronarse en singles de ATP.

En el trayecto dejó rivales con apellidos fuertes. El camino terminó con Tiafoe, pero antes fue Sousa, un destacado referente local. Luego Marin Cilic, después Richard Gasquet y en las semifinales el que llegaba como campeón defensor, Albert Ramos Viñolas. “Fueron partidos difíciles, pero a la vez lindos desafíos, contra jugadores que fueron muy buenos pero que en estos momentos no estaban en su máximo nivel, algo que tenía que aprovechar -explica Báez-. Gasquet no es el que estuvo número 7 del mundo, pero de todos modos tiene una jerarquía espectacular y había que superarlo. Tuve momentos buenos durante toda la semana y también algunos arranques complicados. Pero tenía que encarar las dificultades y lo hice”.

La historia escrita en Estoril tiene un extraordinario guiño del destino. Desde el inicio del torneo y tras cada victoria, Báez firmó la cámara de TV con un “Why not me?” (Por qué yo no?) , un leitmotiv inspirado por una pulsera que lleva Tiafoe…, que terminó siendo su último rival. “Es increíble. Hace poco Tiafoe estaba jugando un partido, lo estábamos viendo con mi entrenador [Sebastián Gutiérrez] y me dice: ‘¿Viste la pulsera? Te tenés que tatuar lo que dice’. Tomamos esa frase con atención, más que nada con el significado de creer en mí, en lo que tengo, en lo que soy, en valorarme. ¿Por qué yo no? Si uno cree, puede” , le dice Báez a LA NACION. Su vínculo con Tiafoe no es nuevo: es, según contó el argentino, uno de los jugadores que más cordialidad le mostró en estos pocos meses que lleva en los vestuarios del ATP Tour. Durante la ceremonia de entrega de premios, el norteamericano, un deportista comprometido con la igualdad y la lucha contra el racismo, se corrió del foco y no tuvo problemas en descorchar una botella de bebida alcohólica y derramársela en la cabeza al campeón.

Frances Tiafoe "bañando" a Sebastián Báez, el campeón del Estoril Open, durante la premiación.
Frances Tiafoe "bañando" a Sebastián Báez, el campeón del Estoril Open, durante la premiación.


Frances Tiafoe "bañando" a Sebastián Báez, el campeón del Estoril Open, durante la premiación.

“Estaba escrito, era la energía, no podía ser diferente. En las semifinales, Tiafoe estuvo match point en contra, casi por irse, pero ganó y llegó a la final. Yo ya había vivido la final de Santiago, en la que perdí, tenía que sacarme la astilla y pude. Acá, después del partido, me lo encontré en el vestuario a Frances y charlamos un poco. Nunca había entrenado con él, simplemente lo saludaba y él lo hacía con mucha buena onda a diferencia de otros, que son más distantes. Es un gran tipo. Me cae muy bien. De las mejores personas que conocí en el circuito. Como dije antes: hace una semana estaba con poca confianza, pero cambié la energía”, sentencia Báez.

-En 2021 ganaste seis trofeos Challengers y al final del año entraste en el Top 100. Pocos meses después ya sos campeón individual de ATP. ¿Qué magnitud le das al logro?

-Lo dimensiono como una buena semana y como una motivación para seguir mejorando. Son objetivos cumplidos que al final de mi carrera los voy a poder ver y disfrutar más que ahora. Hoy no sé qué tan grande o pequeño es. Es muy importante, sí. Pero tengo 21 años y quiero seguir creciendo y haciendo cosas grandes. El año arrancó recién, todavía no estamos ni en la mitad, falta mucho recorrido. Eso siento.

En el vestuario, tras la final de Estoril: Sebastián Báez, el campeón, junto con Tiafoe (finalista) y Sebastián Gutiérrez (coach del argentino).
En el vestuario, tras la final de Estoril: Sebastián Báez, el campeón, junto con Tiafoe (finalista) y Sebastián Gutiérrez (coach del argentino).


En el vestuario, tras la final de Estoril: Sebastián Báez, el campeón, junto con Tiafoe (finalista) y Sebastián Gutiérrez (coach del argentino).

-Entraste en Estoril siendo 59° y te vas dentro del Top 40, lo que te permitirá superar en el ranking a Roger Federer, que obviamente está inactivo, pero el dato no deja de ser llamativo.

-Sí, es muy relativo, hace mucho que Roger no juega, está lesionado y al final de su carrera. Él es uno de mis ídolos. Siempre será uno de los más grandes de todos los tiempos. Ojalá que pueda jugar un poco más, me encantaría. Lo mismo digo sobre Juan Martín (Del Potro). Es mi deseo para ambos.

La firma de Báez en la cámara a medida que avanzó el ATP de Estoril: del "Why not me? (Por qué yo no?)" al "Yes it's me! (Sí soy yo!)" .
Estoril Open


La firma de Báez en la cámara a medida que avanzó el ATP de Estoril: del "Why not me? (Por qué yo no?)" al "Yes it's me! (Sí soy yo!)" . (Estoril Open/)

-Al ganar un ATP cumpliste uno de tus sueños y terminaste firmando la cámara “Yes it’s me!” (Sí soy yo!). ¿Qué viene ahora?

(Sonríe)-¡Me encantaría saberlo! Por lo pronto, de Estoril me voy vacío, sin nada que reprocharme, una sensación que no me estaba llevando de los torneos. Me estaban faltando cosas. Pero siento este triunfo como una consecuencia del trabajo que hacemos con mi equipo. Viví una gran semana, en la que fui creciendo a medida que avanzaron los días. Estoy muy contento con lo que se logró, lo valoro, pero vamos por mucho más.