Ryan García asegura tener una vida equilibrada antes del duelo más importante de su carrera

A sus 24 años, Ryan García es más que un boxeador. También es un YouTuber y rey en las redes sociales con 9.4 millones de seguidores en Instagram, 5.2 millones en TikTok y varios centenares más en otras plataformas. Además, si hay un evento popular en Los Ángeles, el joven pugilista estará ahí, como en Wrestlemania 39 o en alguna alfombra roja de los premios Óscar en el mundo del entretenimiento.

A primera vista, parecería que todo eso es una distracción, pero los que conocen a García dicen que está más concentrado que nunca para el duelo más importante de su carrera cuando se mida el próximo 22 de abril a Gervonta Davis en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada. Este enfrentamiento podría ayudarle a ganarse el respeto de mucha gente en el deporte que lo considera solamente una estrella de las redes sociales. Pero también, podría ocasionarle su primera derrota pues enfrente tendrá a un rival que aniquiló sin piedad a un campeón sólido como Leo Santa Cruz, además de tener la potencia y el talento para acabar con el invicto del californiano de un solo golpe.

Para García, su rapidez en los puños, presencia y un respetable gancho de izquierda son sus aliados más grandes ante un contragolpeador potente.  Algunos escépticos del talento de García argumentan que el mentón del mexicoamericano no ha sido probado ante rivales del calibre de Davis, además de tener una defensa que ha sido vulnerable en su cita más complicada hasta ahora, ante Luke Campbell, quien lo derribó antes de ser noqueado por King Ryan. García también ha tenido sus batallas mentales, algo que salió a la luz cuando tenía previsto pelear contra Javier Fortuna en julio de 2021, pero se retiró del combate tres meses antes porque sufría de depresión y ansiedad.

"Cuando estaba hundido, no creía que fuera a vivir", dijo García en su momento a Inside Boxing Live. "Estaba muy deprimido y adopté malos hábitos. Empecé a beber, y yo nunca bebo. Pero me emborrachaba todo el tiempo. En algún momento quise suicidarme".

García regresó a los 13 meses y venció a Emmanuel Tagoe en una pelea poco competitiva. Derrotó a Fortuna tres meses después y decidió que eso era suficiente para asumir el compromiso ante Davis, un oponente que ha arrollado a sus rivales en la división de peso superpluma y peso ligero.

Al igual de cuando volvió de su inactividad en 2022, King Ryan dijo el martes que se encontraba bien mentalmente y basado en su fe cristiana, ha encontrado “un balance físico, mental y espiritual”.

“En todo momento, pienso en lo que está en mi control y fuera de mi control. Dejó que mis sentidos y lo que está alrededor de mí, me guíe”, declaró García a LA Times el martes durante un entrenamiento ante la prensa en Beverly Hills.

García ambién se mostró enojado ante las críticas que ha hecho Davis sobre su persona, como cuando lo criticó la semana pasada por beber y apostar mucho, y señaló que su rival no es una persona que ha madurado, a pesar de tener cuatro años más que él.

El martes, a García lo acompañaron su madre Lisa y su padre Henry, quienes lo alentaron en un entrenamiento ante los medios de comunicación en una lujosa mansión de Beverly Hills, donde también estuvo su promotor Óscar de la Hoya.

“Él sabe su trabajo, es disciplinado. Él sabe que esto no es un juego”, declaró Henry sobre su hijo, quien muchas veces ha sido cuestionado sobre su disciplina.

“Ha crecido estando pendiente de su bienestar físico, bienestar mental y su bienestar espiritual. Cuando algo no está bien, no tiene un balance”, declaró Lisa sobre Ryan, el mayor de sus dos hijos varones. “Es muy bueno para regresar a tener su vida equilibrada. En este nivel, de élite, tienes que tener todo eso bien balanceado. Si físicamente no estás bien, algo puede salir mal, si mentalmente no estás bien, tu IQ de pelea se puede desenfocar. Y espiritualmente tienes que mantener la calma”.

A pesar de tener fama y dinero, Lisa señaló que su hijo es un humano y como cualquier otro, también tiene sus retos y no es perfecto. Además, Lisa recordó muchos momentos difíciles que han vivido como familia que los hacen fuertes, como cuando no tenían dinero para ir al cine y entre ellos tenían competencias de actuación, en las que sus hijos interpretaban escenas de películas y que Ryan se llevaba varios de los premios ficticios.

Además, Ryan ya mostraba señales de lo que lo apasionaría desde la primaria, especialmente cuando el director de la escuela llamó a su madre para decirle que por favor le dijera a su hijo que no hiciera sombra de boxeo a la hora de recreo porque eso podría incitar a otros niños a pelear.

Lisa también recordó cuando García estaba en cuarto grado, entró a un programa de talento de la escuela y le informaron que tenía a un niño “muy talentoso atléticamente”. Su mamá, desde que Ryan tenía cuatro años, se daba cuenta que le interesaban los deportes pues trataba de imitar a las Tortugas Ninja con su hermano Sean.

“Vi que estaban muy coordinados. Ni habían conocido el boxeo a esa edad y recuerdo pensar: 'van a hacer algo grande con sus manos'”, indicó Lisa, quien expresó que el lado de la disciplina y determinación de García viene de su esposo Henry, mientras que el lado sentimental y sensible viene de ella.

El martes, tanto García como sus padres parecían muy tranquilos, de cara a lo que muchos consideran que será la Pelea del Año, una cita que definirá el futuro boxístico del mexicoamericano.

Henry dijo que al momento de sentir que el duelo ante Davis es una realidad, se dio cuenta que valió la pena todo el sacrificio vivido durante años.

“Este es su momento, lo hicimos todo bien. Todos los años que estuvimos preparándonos fue para estar aquí. Estoy tan contento”, declaró Henry, quien se dio cuenta que su hijo estaba “completo” para ir por el título tras su victoria ante Campbell.

La pelea ha girado mucho en torno al tema de una cláusula de rehidratación y el peso pactado de 136 libras, donde García no ha peleado desde 2021 pues su última contienda en 135 fue cuando derrotó a Campbell. Después de eso tuvo dos duelos, en 139 ante Tagoe y 140 contra Fortuna.

Henry, parte de la esquina de su hijo, señaló que no hay preocupación por ello debido a que actualmente su hijo está en 139-140 libras y todavía tienen 10 días para estar en las 136 libras. En la contienda también hay una cláusula de rehidratación, en la que indica que ninguno de los dos boxeadores podrá pasarse más de 10% del peso la madrugada después del pesaje.

“Va a ser fácil dar el peso”, declaró García. "Estoy comiendo todos los días, me siento bien".

“Ryan nunca sube más de 10 libras, Ryan está bien”, declaró Henry. “Cuando pelee contra Gervonta, va a estar en las 142”.

Con la ciudad de Los Ángeles como fondo, García comió un par de tacos en Beverly Hills, bromeó y abrazó a su mamá, antes de darle un beso. Luego se marchó para preparar el duelo más importante de su vida.

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Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.