Rugby Championship 2022: el mayor desafío para los Pumas camino al Mundial y el salto de calidad que necesita dar el equipo

Los Pumas son un canto al entusiasmo luego de la serie ganada a Escocia en julio; ahora la exigencia subirá mucho: Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica en el Rugby Championship.
Los Pumas son un canto al entusiasmo luego de la serie ganada a Escocia en julio; ahora la exigencia subirá mucho: Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica en el Rugby Championship. - Créditos: @Javier Corbalán

Eso de que el Rugby Championship es más demandante que el Mundial es una verdad a medias. Es cierto que en la Copa del Mundo no existe una seguidilla de partidos con la exigencia que imprimen Nueva Zelanda, Sudáfrica y Australia. Del otro lado, este certamen no es un fin en sí mismo, sino un escalón camino a la gran cita de Francia 2023. El que comenzará el sábado próximo es el peldaño más trascendente.

Estos seis partidos en dos meses serán determinantes para que el equipo adopte la forma que pretende el nuevo entrenador Michael Cheika, ya que representan casi 50% del recorrido que resta hasta el Mundial. Tres test matches en noviembre, un Rugby Championship reducido y acaso algún amistoso poco antes del torneo máximo serán toda la actividad que les quedará a los Pumas luego del certamen que comenzará el próximo fin de semana, en el que la Argentina afrontará ante Australia el primer partido, en Mendoza.

La disolución del Súper Rugby afectó al ámbito argentino más que al de ningún otro país. Los jugadores quedaron dispersos por el mundo en clubes con calendarios contrapuestos a los del seccionado, con estilos de juego muy disímiles y casi sin descanso. Sudáfrica, el otro marginado, encontró su lugar en el hemisferio del norte y mantuvo en el United Rugby Championship sus cuatro principales franquicias. La Argentina es, de los cuatro, el único país que no tiene control sobre sus jugadores durante todo el año.

Los Pumas en el norte argentino; muy dispersos durante el año a partir de la pandemia, los jugadores argentinos se reúnen en el seleccionado.
Los Pumas en el norte argentino; muy dispersos durante el año a partir de la pandemia, los jugadores argentinos se reúnen en el seleccionado. - Créditos: @Twitter

El primer año bajo este nuevo régimen fue problemático. El Championship 2021 fue el peor en la historia de los Pumas, con el atenuante de que no pudieron jugar como locales. El año terminó con la salida abrupta de Mario Ledesma, que acortó los plazos de preparación para el Mundial. Para el inicio de su breve ciclo, Cheika repitió la fórmula que había instrumentado su antecesor y en la ventana de julio convocó a los mejores jugadores disponibles.

El primer paso, con un triunfo en la serie ante Escocia por 2-1, fue alentador. Primero, por el resultado. Desde hacía 15 años los Pumas no ganaban una serie en casa. Un impulso vital para el ánimo de un equipo que venía golpeado. Pero el signo más reconfortante no pasa por el score, sino por el carácter que mostraron los Pumas, que después de mucho tiempo sacaron a relucir la garra que los hizo mundialmente famosos. En las dos victorias, en el primero y el tercer partidos, supieron recuperarse de momentos adversos y terminaron imponiéndose en los últimos 20 minutos por actitud. Especialmente, en el último, en que revirtieron una desventaja de 15 puntos y definieron con un try en la última jugada.

En cuanto al juego, quedaron varios aspectos neurálgicos por mejorar, aunque también se entrevió una propuesta más ambiciosa y atractiva. Lo más preocupante fue la defensa, con fallas individuales que costaron caras y vulnerabilidad en los últimos metros. Escocia marcó tries demasiado fáciles. El scrum y el ruck, los otros dos factores que señaló Cheika como fundamentales, tienen mucho margen para crecer pero superaron la primera prueba. Lo más satisfactorio fue volver a ver a los Pumas más confiados a la hora de jugar la pelota con las manos y más variados en ataque que en el ciclo anterior.

Al cabo de dos semanas de descanso tras la ventana de julio con Escocia, los Pumas se congregan para afrontar el Rugby Championship.
Al cabo de dos semanas de descanso tras la ventana de julio con Escocia, los Pumas se congregan para afrontar el Rugby Championship. - Créditos: @Twitter

Ahora bien: el incremento de la exigencia que impone el Rugby Championship demandará, necesariamente, un salto de calidad en el juego de los Pumas en la medida en que pretendan ser competitivos. Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia, en orden de dificultad, están un par de escalones por encima de Escocia.

El primer rival, los Wallabies, aparece como el más falible. Perdió en su casa la serie frente a Inglaterra (equipo que está lejos de la solidez que mostró en el Mundial Japón 2019), aunque mostró buenas respuestas anímicas contra la adversidad y, como siempre, gran capacidad de explosión con los backs. No viene el potente centro Samu Kerevi, pieza clave en la estructura ofensiva de Dave Rennie. Los Pumas tienen la capacidad de imponerse en la lucha de forwards y a partir de eso, si ajustan las deficiencias en defensa, aparece una posibilidad cierta de victoria. Con la ventaja de que Cheika conoce a los australianos como nadie. Además, los dos enfrentamientos serán en la Argentina, en razón del formato del certamen que se estrena este año con el fin de reducir las horas de vuelo de los equipos. El segundo será el sábado siguiente en San Juan.

Hoy por hoy, Australia es el más débil de los tres contrincantes de la Argentina en el Championship; viene de perder una serie como local contra Inglaterra.
Hoy por hoy, Australia es el más débil de los tres contrincantes de la Argentina en el Championship; viene de perder una serie como local contra Inglaterra. - Créditos: @ap

Luego vendrá la escala más complicada, con dos partidos consecutivos en Nueva Zelanda. Los All Blacks están en crisis luego de perder la serie contra Irlanda y sufrir dos derrotas seguidas como locale por primera vez en 24 años. ¿Acaso también ellos perdieron al aislarse de Sudáfrica y la Argentina en el Súper Rugby? La dirigencia mantuvo a Ian Foster pero le dio más incidencia a Joe Schmidt. Los de negro abrirán con dos encuentros en Sudáfrica, un cruce que tiene condimentos extradeportivos luego de que Nueva Zelanda expulsara a los sudafricanos del Súper Rugby; desde entonces uno y otro no volvieron a medirse en la tierra de los Springboks. Los oceánicos bien pueden llegar a los enfrentamientos con los Pumas con dos derrotas a cuestas.

La desazón de David Havili simboliza el peor momento de Nueva Zelanda en mucho tiempo; All Blacks perdió dos veces como anfitrión de Irlanda, que gracias a eso es el número 1 del ranking mundial por primera vez.
La desazón de David Havili simboliza el peor momento de Nueva Zelanda en mucho tiempo; All Blacks perdió dos veces como anfitrión de Irlanda, que gracias a eso es el número 1 del ranking mundial por primera vez. - Créditos: @ap

El cierre será un ida y vuelta con los campeones del mundo, el 17 de septiembre en Vélez y siete días más tarde en Durban. De los tres, el africano es el rival que a priori luce más sólido y consolidado.

Sudáfrica durante el primer partido de Rugby Championship entre los Springboks de Sudáfrica y Argentina en el Estadio Nelson Mandela,
Sudáfrica es, además del campeón mundial, el conjunto más fuerte de los cuatro del Championship hoy por hoy. - Créditos: @ap

Recién entonces habrá una noción del rendimiento físico de los jugadores argentinos. Su único reposo se dio en estas dos semanas entre el test match de Santiago del Estero y el reencuentro previo al viaje a Mendoza. En 2021, el desgaste fue evidente. Cheika hizo pequeños ajustes y para los primeros dos partidos les dio descanso a Guido Petti Pagadizábal y Bautista Delguy, y no sería de extrañar que repitiera en las siguientes series con otros jugadores. Los únicos que están bajo el mismo régimen que los adversarios son Pablo Matera (Crusaders, de Nueva Zelanda), Santiago Medrano (Western Force, de Australia) y los que vienen de Jaguares XV (Ignacio Ruiz y Mayco Vivas). También es cierto que varios rugbiers, afectados por lesiones, no jugaron completa la temporada.

Guido Petti Pagadizábal estará ausente en los dos encuentros con Wallabies, en Mendoza y San Juan, porque tendrá descanso programado, al igual que Bautista Delguy.
Guido Petti Pagadizábal estará ausente en los dos encuentros con Wallabies, en Mendoza y San Juan, porque tendrá descanso programado, al igual que Bautista Delguy.

Respecto a la serie frente a Escocia, los Pumas recuperan algunas piezas en puestos clave. Se estima que estarán en condiciones de actuar Tomás Cubelli, el medio-scrum titular, y Nicolás Sánchez y Benjamín Urdapilleta. De acuerdo con el esquema inicial en el encuentro de Jujuy, cabe inferir que Cheika se inclinará por uno de estos dos para la camiseta 10. Santiago Carreras, el back argentino más desequilibrante, cumplió en sustitución de ambos, pero como fullback puede explotar aun más sus condiciones; en la táctica actual, además, hace las veces de segundo lanzador, por lo que retrasarlo no implicaría restarle contacto fluido con la pelota. Por historia, Sánchez merece la chance de empezar como titular. Por presente, Urdapilleta tendrá la oportunidad de ganarse el puesto cuando le toque entrar.

Santiago Carreras es el mejor back de los Pumas en el presente; fullback natural, fue designado por Michael Cheika como apertura a falta de Nicolás Sánchez y Benjamín Urdapilleta.
Santiago Carreras es el mejor back de los Pumas en el presente; fullback natural, fue designado por Michael Cheika como apertura a falta de Nicolás Sánchez y Benjamín Urdapilleta.

Las demás posiciones están bien cubiertas, pero en la mayoría no hay mucha profundidad. La seguidilla y la exigencia de estos partidos son una buena posibilidad de darles rodaje a los que vienen asomando, como Juan Martín González, Thomas Gallo, Santiago Grondona, Lucio Cinti y Lucas Paulos.

Más allá de los resultados, que ante equipos de esta envergadura siempre son difíciles, los Pumas tienen como objetivo lograr un piso de rendimiento, algo que no han logrado en los últimos tres años y medio. Afirmarse en las bases que pregona el entrenador (defensa, scrum y ruck) y ganar en solidez y regularidad. Eso puede ser suficiente para rescatar alguna que otra victoria sobre oponentes que, si bien son superiores, están en etapa de transición y construcción con miras al Mundial.

Un piso de rendimiento: lograr eso es el propósito principal del seleccionado argentino para este Rugby Championship.
Un piso de rendimiento: lograr eso es el propósito principal del seleccionado argentino para este Rugby Championship. - Créditos: @Twitter

Por segundo año consecutivo, la Argentina encara el Rugby Championship sin una competencia profesional de elite en la que desarrolle sus jugadores. Esta vez, en medio de un proceso cortoplacista que recién comienza. El contexto no es alentador. Frente a Escocia, los Pumas sacaron a relucir ese plus que los identifica. A partir de ello se puede adquirir consistencia.