Uruguay está lista para atravesar un periodo de renovación en los próximos años después de la pronta eliminación en la Copa del Mundo de Catar 2022, y Ronald Araujo está llamado a ser uno de los nuevos líderes de La Celeste.

“Ya nos toca, estamos en la edad de asumir el rol de liderazgo. Los veteranos nos guían a que empecemos a tomar ese rol de poder liderar y armar nuestro camino en la selección. Me pone muy contento. Además, hay una generación muy buena que viene por detrás”, declaró el defensor de Barcelona en diálogo con EFE.

El jugador de 23 años también se animó a vislumbrar el Mundial 2026 que se celebrará en México, Canadá y Estados Unidos. “Nuestra generación va a tener mucha experiencia porque lleva varios años en Europa y el sub-20 de Uruguay hizo un tremendo Sudamericano. Creo que se puede hacer un gran Mundial”, agregó.

Además, manifestó la tristeza que sintió por no haber podido ayudar al equipo de Diego Alonso, que se quedó afuera del Mundial en la fase de grupos. “No poder jugar el Mundial me puso muy triste, pasé momentos muy duros porque era lo que más quería. Quería estar ahí, con mi selección, jugar un Mundial con mi país. Me dolió bastante no debutar, estuve muy mal después del Mundial. Le metí muy duro para poder estar y la lista era de 26 jugadores. Obviamente, si hubiera sido de 23 no habría ido al Mundial. Como fue de 26 tuve la chance de ir”, reconoció.

Araujo tuvo que pasar por el quirófano en septiembre del 2022 por una avulsión del tendón del aductor largo del muslo derecho y aprovechó el tiempo de recuperación para trabajar. “La lesión me sirvió muchísimo, sobre todo para trabajar el tiempo que estuve fuera, analizar mucho, ver los errores. Miré muchos vídeos, físicamente trabajé muchos aspectos que, cuando estás compitiendo, quizá no trabajas. La idea era volver al ritmo del equipo, que es difícil cuando está tres meses fuera”, explicó.

El Charrúa se convirtió en un pilar de la defensa de Barcelona y elogió a su entrenador: “Con la llegada de Xavi aprendí muchísimo más porque él nos devolvió la filosofía Barça, que se había perdido en los últimos años. Yo soy el que más aprendí, pero el equipo cambió y se está viendo en los resultados”.

“Se está viendo el fruto del trabajo. Desde que llegó Xavi, fuimos creciendo. Implementó todas las cosas que él quería. Además, pudimos hacer una buena pretemporada y tanto técnica como tácticamente aprendimos muchísimo a nivel defensivo. Llegaron refuerzos en defensa y eso suma muchísimo”, añadió.

Araujo también asume el rol de líder en el Camp Nou. "Me considero un líder por mi carácter, por cómo soy, me gusta que el equipo esté bien, me gusta saber cómo están mis compañeros, porque quiero que estén todos bien. Dentro de la cancha, hablo todo el tiempo porque es la manera de estar concentrado. Sé que eso ayuda mucho a los compañeros”, expresó.

Barcelona es puntero de LaLiga con ocho puntos de ventaja sobre Real Madrid y está encaminado al título. “No ganar LaLiga sería una tristeza tremenda, porque el equipo está muy bien, porque ya nos toca a nosotros poder ganarla después de tantos años. Con el equipo que tenemos creo que debemos hacerlo”, cerró el defensor.

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