Yahoo Noticias Ridge Holland, el luchador de la WWE que está siendo acosado por lesionar a un rival
Ridge Holland lesionó de gravedad a Big E, uno de los talentos estelares de la WWE, en marzo de 2022. No tuvo la intención de hacerlo, sino que ejecutó mal un movimiento; provocó que cayera directo sobre su cuello, en lugar de aterrizar sobre su espalda, y que se fracturara las vértebras C1 y C6. A un año del accidente, la gente no lo ha perdonado; aseguró que continúan enviándole mensajes de odio.
Here is the clip of Ridge Holland suplexing Big E onto his head tonight from #Smackdown that led to him leaving on a stretcher. pic.twitter.com/7oLQDC9QhG
— HeelToTheFace (@HeelToTheFace) March 12, 2022
A través de Twitter, el gladiador británico indicó que ha recibido ataques de todo tipo: “Amenazas de muerte. Amenazas a mi familia. Presión para que pierda mi trabajo. Ser acusado de racista. Genial. Siguen llegando”. Aún cuando Big E manifestó que no le guarda rencor alguno, pues lo apoyó durante su rehabilitación y se ha mantenido al pendiente de su recuperación.
Death threats. Threats to my family. Lobbying for me to lose my job. Being labeled as racist. Great stuff 👍🏻 keep ‘em coming.
— Ridge Holland (@RidgeWWE) March 13, 2023
“No tengo ningún tipo de problema con Ridge. Vino conmigo y ha sido muy amable. Lo que hacemos es peligroso. Sabemos a lo que nos exponemos, lo que me sucedió fue algo desafortunado. Pero no estoy muerto, estoy vivo y me siento bien”, dijo a ESPN en julio. Agregó que le regaló una caja con carne roja, a modo de disculpas, mas él no está acostumbrado a comerla; por lo que, se la obsequió a un amigo cercano.
En el momento de la lesión, el luchador estadounidense de 37 años lucía como uno de los mayores atractivos de la empresa. Había ostentado el Campeonato de la WWE, el más prestigioso de la promotora. Asimismo, se sentía orgulloso de ser un digno representante afroamericano. Replicó los casos de éxito de su compañero de equipo Kofi Kingston y de Bobby Lashley.
El incidente le cambió el panorama. Holland no fue sancionado, pues WWE comprendió que se trató de un imprevisto, sino que lo retiró de sus programas por algunas semanas para cuidar su imagen. Eventualmente, regresó a competir. Por el contrario, Big E confesó que estuvo a punto de quedar parapléjico. En una reciente charla con TMZ Sports, advirtió que su futuro todavía es incierto.
“Sólo quiero tomar la mejor decisión. Aún tengo que ver qué es lo que dicen los escáneres, esperar la interpretación médica y después decidiré. Si mi carrera luchística termina, está bien. Si no, también. Lo que tenga que ser, será. La vida siempre tiene giros y cambios que no sueles anticipar; es un regalo. Si estás aquí, caminando, sano, tienes a tu familia y amigos, es una bendición”, afirmó.
La declaración del exmonarca es el motivo por el que los mensajes de odio volvieron. En el pasado, la crítica de Dutch Mantell alentó un sinfín de ataques contra Holland. El antiguo atleta y mánager de la WWE lo acusó de ser descuidado en el ring. Asimismo, expresó que no tenía talento, no sabía dirigirse al público con el micrófono y que no entendía qué es lo que los directivos veían en él.
En contraste, el oriundo de Liversedge, Inglaterra contó a Metro UK que el percance le significó un duro “golpe de confianza”. Sin embargo, resaltó que estaba enfocado en mejorar para demostrarle su potencial a los espectadores. Hoy, sigue siendo agredido por el hecho. Sí, nunca podrá borrarlo de su historial; aunque continuará intentando resarcirse. Xavier Woods, colega de Big E, no dudó en respaldarlo.
Citó su tuit y le solicitó a los fanáticos que dejaran de acosarlo en redes sociales. “La lucha libre profesional es sumamente riesgosa. Todos los que estamos involucrados en ella lo entendemos. Ridge y su familia no merecen ser tratados de esta manera. Mejor utilicen su energía para hacer algo positivo, como enviarle mucho amor a Big E. Sean amables. Por favor, sean amables”, externó.
