Raúl Jiménez está de regreso y con él esperanza de la Selección Mexicana

Raúl Jiménez ha vuelto. El Wolverhampton presumió el regreso del delantero mexicano a las prácticas con el equipo, hecho que sin duda llena de entusiasmo a un sector de la afición mexicana y a Gerardo Martino, quien deposita en él una de las decisiones que más críticas han despertado.

Jiménez no está con la Selección Mexicana en la gira previa a Qatar 2022 derivado de la lesión que sufrió a inicios de septiembre. Sin embargo, su ausencia en Girona para nada compromete su lugar en la Copa del Mundo: el Tata lo ha esperado todo lo posible para que pueda sanarse y colarse a la lista final que se entrega el 14 de noviembre.

El timonel del Tri puede sentir alivio al saber que Raúl está más cerca de su recuperación; con esta épica vuelta, el técnico sudamericano podría justificar la indecisión que ha tenido para elegir al centrodelantero titular de México, y también apagar —un poco— las críticas hacía él y los otros jugadores.

Una de las críticas que más ha recibido Martino tiene que ver con qué delanteros asistirán y cuáles jugarán en el mundial. Henry Martín, Rogelio Funes Mori y Santiago Giménez conformaban la baraja de opciones del estratega; nadie estaba conforme con que alguno de los 3 fuera el titular, pero con la vuelta de Raúl Jiménez, la decisión parece ser más sencilla.

Una de las situaciones que más molestia generaba en la afición mexicana era la idea de un Funes Mori titular en Qatar. Si bien es un histórico en la Liga MX su nivel reciente no respalda —para muchos— su posible presencia en la lista final.

Gracias a la idea del Melli como titular en Medio Oriente se dispararon las críticas hacia el seleccionador y atacante. Algunos lo creen insuficiente para una Copa del Mundo, pese a que sea el máximo romperedes de Rayados y uno de los atacantes más importantes en la era moderna del fútbol mexicano.

La indecisión parece estar resuelta si el Lobo de Tepejí se recupera. Aunque no tenga el ritmo de juego se perfila como el delantero titular en el torneo internacional; es quien más experiencia tiene, el que compite a mayor nivel, el que puede aportar algo distinto al juego.

Gerardo Martino puede respirar, por ahora. No es lo mismo elegir a uno entre 3 jugadores —todos criticados— para el puesto en el 11 inicial, que escoger cuáles serán las opciones de cambio de “la estrella” que representa Raúl. Porque sí, el Tata juega con un solo “9” y nada ha hecho que cambie su idea.

Y si no funciona

La lesión de Jiménez se dio es una pubalgia o comúnmente llamada “hernia del deportista”, provoca inflamación en la zona de inserción de la musculatura abdominal, en el borde superior del pubis y en los músculos abductores; también puede imposibilitar el caminar y realizar cualquier tipo de actividad física con normalidad.

Carlos Hermosillo aseguró que dicha lesión es de trato difícil, por lo que su presencia en Qatar puede estar comprometida.

El mejor de los escenarios es aquel en el que Raúl pueda presentarse al 100% de sus capacidades a la justa internacional y dicho problema no se manifieste durante la competencia. Pero si esto no ocurre así, corre el riesgo de empeorar su lesión y de no aportar algo significativo a la Selección Mexicana.

¿Y quién será el culpable? Gerardo Martino. En caso de que el ariete no trascienda en Qatar 2022 el principal señalado será el técnico, pues “¿a quién se le ocurre llamar o alinear a un elemento recién curado?" Parte de la reputación de Martino depende de Raúl y su posible rendimiento.

También es cierto aclarar que el atacante de 31 años tampoco ha estado cerca de su mejor nivel previo a su más reciente lesión. En la temporada pasada apenas anotó 6 goles con Wolverhampton.

De hecho, hay algunas personas que desde ahora creen que llevarlo no es una opción viable; no ven posible que alcance un nivel y salud óptimo para el primer juego que tiene México, el cual es contra Polonia el 22 de noviembre. Es natural pensar que no alcance la mejor de sus versiones en un lapso de tiempo tan breve.

El trabajo del seleccionador nacional ya de por sí es cuestionable, y esa presión aumentará si las decisiones que tomó no funcionaron, a pesar de que se tardó en tomarlas. Los jugadores son los responsables de salvarlo aun cuando no tienen "algo que perder".

Porque sí, la gloria siempre es para los futbolistas. En caso de que México regale una odisea en Qatar 2022 todo el reconocimiento estará en los hombres que saltaron a la cancha y no en aquel que los comandó para hacerlo.

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