Desde ranas raras a tiburones feos: en busca de la protección de todos los animales

Desde ranas raras a tiburones feos: en busca de la protección de todos los animales

"Eres la rana más rara de la India". No parece el mejor reclamo para un videojuego, pero, según una nueva y audaz organización conservacionista, atrae mucho a los jugadores.

'On The Edge' es una organización dedicada a reconectar a la gente con la naturaleza. Recientemente ha lanzado dos videojuegos para llamar la atención sobre algunas de las criaturas menos atractivas del reino animal.

En 'Salvar a la rana púrpura', los jugadores esquivan búhos, serpientes, trenes y otros peligros que ponen en peligro su vida para emprender una esperanzadora carrera hacia el lugar de cría.

En 'Kākāpō Run', sin embargo, eres un loro no volador de Nueva Zelanda que intenta llegar a un santuario protegido.

Junto con diversas campañas de narración digital, 'On The Edge' utiliza estos juegos para poner de relieve a aquellos animales que históricamente han recibido menos atención en materia de conservación.

El Dr. Alex Bowman es el director de Historia Natural de esta organización, y resume su trabajo de manera muy gráfica: "Los animales más bellos no son los más importantes, pero desgraciadamente acaparan la atención".

La belleza, el mayor reclamo

De los pandas a los leopardos de las nieves, las criaturas más bellas del reino animal dominan con claridad el debate sobre la conservación. Pero es importante recordar que también hay que salvar a los animales "feos".

Los estudios han demostrado que los animales menos estéticos atraen menos investigación y menos fondos para su conservación. Según un trabajo de investigación de 2020, los vertebrados como los mamíferos, los peces y los reptiles reciben 468 veces más inversión en esfuerzos de conservación que los invertebrados (insectos, arañas o gusanos).

Según un estudio francés de 2022, los peces más feos son los que corren más riesgo de desaparecer, pero también son los más importantes desde el punto de vista ecológico.

Desgraciadamente, tiene sentido: para una organización benéfica es más fácil recaudar fondos vendiendo un peluche de un panda que el de un oscuro insecto.

Pero las especies olvidadas o menospreciadas son a menudo ecológicamente cruciales. Las avispas, por ejemplo, son miembros muy valiosos de un ecosistema funcional, ya que regulan las poblaciones de orugas, arañas y de esas moscas verdes que tantos estragos causan en los jardines.

Sin embargo, las avispas sólo reciben una mínima parte de la atención que reciben los abejorros. "Todo el mundo se fija en el abejorro, ese pequeño polinizador peludo con el que nos identificamos por su ética de trabajo", explica Bowmer. "Y las avispas necesitan nuestra atención tanto como esas abejitas mimosas que vemos en las campañas todos los días de la semana".

Animales EDGE

Pues bien, la fundación 'On The Edge' pretende dar la vuelta al guión, utilizando campañas digitales innovadoras para inspirar cariño por estas criaturas poco queridas.

Las siglas significan Evolutionarily Distinct and Globally Endangered (Evolutivamente Distinta y Globalmente en Peligro). Entre las especies EDGE se encuentran por ejemplo la rana púrpura o el pangolín indio. En conjunto, estos animales únicos representan miles de millones de años de historia evolutiva.

Pero podríamos perderlos para siempre a menos que actuemos con rapidez, invirtiendo dinero en la restauración del hábitat y en programas específicos de recuperación de la naturaleza.

Según un estudio de 2015, el cambio climático hará que una de cada seis especies del planeta se pierda para siempre si no tomamos medidas contra la crisis.

"Para aquellos animales que nos resultan molestos, aterradores o irritantes, basta con cambiar la narrativa. Así es como los protegemos", insiste Bowmer. "Captamos la imaginación, conectamos con la gente a nivel emocional y les cambiamos la imagen que tienen de esos animales".

Vea el vídeo adjunto a la noticia para saber más sobre los animales EDGE.