Qatar 2022. El día después de la dolorosa derrota de Perú; sus rostros lo dicen todo

Fans de Perú al ver que Luis Advíncula falla el penal que los deja fuera de la Copa del Mundo Qatar 202 (Foto: Nikku/Xinhua via Getty Images)
Fans de Perú al ver que Luis Advíncula falla el penal que los deja fuera de la Copa del Mundo Qatar 202 (Foto: Nikku/Xinhua via Getty Images)

DOHA.- A un penal de la gloria. Allí naufragó Perú. No alcanzó el aliento de 10 mil fanáticos que hicieron el viaje desde Lima y fueron mayoría en las plateas del estadio Al Rayyan. No alcanzó tampoco con el empuje que Ricardo Gareca intentó darle al equipo desde el banco de suplentes. El Tigre gritó, protestó, reclamó, se fastidió y hasta se incomodó en ciertos pasajes del encuentro. No alcanzó la mano del arquero Pedro Gallese en el primero de los penales que definieron la historia. Ni ese salto a las alturas de Edison Flores, que terminó con la pelota en el palo de Matthew Ryan, el arquero australiano. A Perú no le alcanzó con el esfuerzo, el sudor; la voluntad. Y tendrá que conformarse por ver el próximo Mundial por televisión.

Gareca dio la conferencia de prensa posterior al partido con un rostro pensativo. Eligió cada palabra como si fuera la última. Procuró no herir a nadie. Defendió a sus jugadores: “Dieron todo, no les puedo reclamar nada”. Recordó los sacrificios que hicieron para estar en el Repechaje; para ganar “la última chance” de ir al Mundial. Al Tigre el partido se le repitió una y otra vez en la cabeza. Confesó que rebobinaba cada acción y que en lo único que podía pensar era en ese maratónico espectáculo que duró dos horas. Y que terminó con su equipo derrotado por penales, después de igualar 0-0 en los 120 minutos.

"No le pudimos dar una alegría a la gente y esto nos duele", destacó Ricardo Gareca - Créditos: @KARIM JAAFAR
"No le pudimos dar una alegría a la gente y esto nos duele", destacó Ricardo Gareca - Créditos: @KARIM JAAFAR

El entrenador argentino habló de “hacer replanteos” y de “evaluar la situación” a su llegada a Lima, la capital peruana. Allí se sentará a hablar del futuro con su jefe, el presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano. Gareca consiguió clasificar a Perú al Mundial de Rusia en un repechaje y acaba de quedar afuera en la misma instancia. Es casi un tótem para el fútbol peruano, que le reconoce varios logros en los siete años que lleva al frente del equipo. “Le dio muchas alegrías al país. Nos enseñó mucho y nos cambió la mentalidad. Ojalá que se pueda quedar, pero depende de él”, se esperanzó Gallese, el capitán peruano, y el único futbolista de la Blanquirroja que enfrentó los micrófonos en la zona mixta. El arquero tenía que esforzarse para que le salieran las palabras.

Pedro Gallese, el arquero peruano; atajó un penal en la definición, pero no fue suficiente
Pedro Gallese, el arquero peruano; atajó un penal en la definición, pero no fue suficiente - Créditos: @MUSTAFA ABUMUNES

La tristeza de Álex Valera, autor del último penal fallido, y el desconsuelo de Luis Advíncula, quien erró el suyo (la pelota dio en el palo y luego salió hacia afuera del arco), fueron dos de las imágenes más tristes de la jornada. El futbolista de Boca anunció tras el partido su decisión de retirarse del seleccionado peruano. Antes, el lateral derecho había dejado la cancha rumbo a los vestuarios tapándose los ojos con la camiseta. Para el resto de sus compañeros, la procesión iba por dentro. “Primero pido perdón a mi familia y amigos por el dolor que les causé. Y a todo el Perú. Soy el único responsable de esta debacle y no me alcanzará la vida para pedir disculpas”, escribió el futbolista de Boca. Y amplió: “Yo hasta aquí llegué. Doy un paso al costado de la selección. No creo que tenga fuerzas para levantarme de esto. A mis compañeros, muchas gracias por todo y perdón por tan poco”.

Luis Advíncula falló su penal y se lamenta; el lateral de Boca no tuvo consuelo a su error decisivo
Luis Advíncula falló su penal y se lamenta; el lateral de Boca no tuvo consuelo a su error decisivo - Créditos: @Mohamed Farag

Esa tristeza de los futbolistas y el cuerpo técnico se potenciaba en los 10 mil peruanos que habían recorrido los 14.392 kilómetros de Lima a Qatar. La peregrinación a Doha comenzó con un ánimo festivo y terminó con caras de tristeza y voces de derrota. Lo que el domingo en el hotel de concentración era algarabía y celebración se transformó en un ambiente casi sepulcral. Todos seguían con sus camisetas puestas esperando por los vehículos que los llevarían a sus lugares de hospedaje. Pero los invadía la desazón por el resultado. Haber estado tan cerca; ver el Mundial tan lejos.

Gareca también sabe que ese penal le quitó la posibilidad de una despedida a tono con su ciclo en Perú. “La selección es una isla”, dicen los peruanos que saben cómo trabaja el Tigre. Y su poder de convencimiento con los jugadores. Por eso nadie se atreve a cuestionarle las largas concentraciones. O el tiempo que destina a preparar a sus futbolistas. Incluso fueron pocos los que pusieron en duda su continuidad al comienzo de las eliminatorias sudamericanas, cuando Perú jugaba mal y defendía peor. Los resultados no aparecían. Gareca siguió y siguió. Y casi corona el esfuerzo con otro pasaje al Mundial. La Argentina, que ya tiene a Gerardo Martino (México), Gustavo Alfaro (Ecuador) y Lionel Scaloni (Argentina) en Qatar, se perdió a un cuarto entrenador mundialista.

Australia, ese verdugo

Para el seleccionado australiano, la victoria (aunque por penales) tiene sabor a revancha. En Rusia 2018, Perú les había ganado por 2-0 con goles de André Carrillo y Paolo Guerrero. En el estadio de Al Rayyan hubo venganza y esta vez celebró el equipo océanico. Su entrenador, Graham Arnold, contó tras la clasificación al mundial cómo había sido su filosofía para encarar este Repechaje: “Tuve que convencerlos de que eran once contra once. Once de rojo y blanco contra once de amarillo. Había que sacarles el nombre Perú, por todo lo que significaba”, recordó.

Andrew Redmayne, el arquero suplente que entró a los 119 minutos exclusivamente para la definición por penales y atajó el último disparo
Andrew Redmayne, el arquero suplente que entró a los 119 minutos exclusivamente para la definición por penales y atajó el último disparo - Créditos: @KARIM JAAFAR

No es la primera vez que los Socceroos se convierten en verdugos de un equipo sudamericano. En el Repechaje para Alemania 2006 eliminó a Uruguay, por ejemplo. Y aquella vez también fue por penales. En aquella ocasión, en Sidney (la serie era a partido y revancha), el héroe australiano fue John Aloisi, quien le convirtió el gol decisivo al arquero Fabián Carini. Aquel resultado de los oceánicos hizo que el mundial alemán tuviera la menor cantidad de representantes sudamericanos desde que en esta parte del mundo las eliminatorias se juegan todos contra todos. En Alemania hubo apenas cuatro selecciones de Conmebol. El mismo número que habrá en Qatar dentro de apenas cinco meses.

El festejo de los Socceroos: Australia vuelve a estar en una Copa del Mundo, a expensas de un rival sudamericano
El festejo de los Socceroos: Australia vuelve a estar en una Copa del Mundo, a expensas de un rival sudamericano - Créditos: @KARIM JAAFAR

Los cupos por continente cambiarán a partir de las próximas eliminatorias, cuyo formato para Sudamérica aún está en estudio. La competencia otorgará seis lugares directos. Y el seleccionado que termine en el séptimo lugar podrá jugar un Repechaje para conseguir su ticket a Estados Unidos, México y Canadá, los tres organizadores. El camino de Perú hacia 2026, entonces, empezó en Al Rayyan. A pesar de la tristeza final. A pesar del interrogante sobre la continuidad de Gareca. A pesar de todo.