Qatar 2022. “¡Argentina, Argentina!”: Lisandro Martínez, David Beckham y el origen del grito de guerra de Manchester United

Cristian Romero y Lisandro Martínez, el defensor del Manchester United que empieza a ser ídolo en Inglaterra
Cristian Romero y Lisandro Martínez, el defensor del Manchester United que empieza a ser ídolo en Inglaterra - Créditos: @Shaun Botterill

El 20 de octubre pasado, Manchester United venció con autoridad a Tottenham, rival directo por los puestos europeos, por 2-0. Lisandro Martínez, central argentino llegado al club en julio, había tenido otra destacada actuación, erigiéndose como uno de los pilares de la defensa Red Devil, y aquella noche sintió por primera vez el reconocimiento de la hinchada del máximo campeón inglés con un cántico impensado: “¡Argentina, Argentina!”. El entrerriano quedó completamente conmovido: “Quise llorar. Porque se me cruzaron muchos momentos por la cabeza. Mis comienzos fueron muy duros. Pensé en mi mamá, mi papá, mi novia, mis hermanas... Y el resultado es también para mi abuelo, mi abuela, que ya no están conmigo pero siento su amor”.

Sin duda, los grandes rendimientos de “Licha” propiciaron una reacción espontánea y genuina de los simpatizantes hacia un jugador que mejoró notablemente una zona muy sensible en el equipo. Pero estuvo lejos de ser el primer destinatario. Aquella arenga ya había sido dedicada a los compatriotas que habían representado al club inglés en el pasado, como Juan Sebastián Verón, Gabriel Heinze, Carlos Tevez y Sergio Romero. Y su origen está intrínsecamente ligado a uno de los episodios más recordados de la historia de la rivalidad entre la Argentina e Inglaterra: el duelo por los octavos de final del Mundial Francia 1998.

La ovación a Martínez, contra Tottenham

La década del ‘90 fue, indudablemente, uno de los períodos más exitosos de la historia de Manchester United, que ganó cinco veces la incipiente Premier League y la cerró con un histórico triplete, sumando la FA Cup y su primera Champions League en 31 años en 1999. Esa sucesión de festejos, junto al halo de superioridad e incluso arrogancia que conllevó, caló profundo entre el resto de los clubes de Inglaterra, cuyos hinchas comenzaron a desarrollar una animosidad cada vez más profunda hacia el equipo que dirigía Sir Alex Ferguson.

El punto más alto de ese desprecio recíproco, sin embargo, llegaría en el Mundial de Francia. La selección que dirigía Glenn Hoddle llegaba con mucha expectativa tras alcanzar la semifinal de la Eurocopa 1996, en la que fueron locales, y su columna vertebral estaba compuesta por algunas figuras de los animadores de la liga: el lateral derecho Gary Neville, el volante Paul Scholes, el veterano delantero Teddy Sheringham y, por supuesto, David Beckham, considerado junto al joven Michael Owen como una de las estrellas de ese plantel. El desenlace es conocido: tropiezo con Rumania en fase de grupos, cruce con la selección argentina en octavos, aquella memorable expulsión al número 7 por una agresión a Diego Simeone y eliminación.

La expulsión a Beckham contra Argentina

Mientras que en Manchester se buscó contener a su figura, en el resto de Inglaterra la reacción fue brutal. Un muñeco de Beckham fue colgado y quemado públicamente en un bar en Londres, y los tabloides lo señalaron inequívocamente como el causante de la derrota por penales. El Daily Mirror fue el más categórico: al día siguiente tituló con la frase “10 leones heroicos, un chico estúpido”, y en la contratapa puso su cara en el centro de un blanco con otros “culpables”, entre los que se incluían el arquero Carlos Roa, el seleccionador Daniel Passarella, Diego Armando Maradona, Madonna en el rol de Evita e incluso Leopoldo Galtieri.

La prueba de fuego llegaría en el primer partido que Manchester United jugaría de visitante en la nueva temporada, nada menos que contra West Ham, equipo profundamente identificado con la selección inglesa. Cada vez que el número 7 tocó la pelota fue recibido con sonoros abucheos de la parcialidad local, y los hinchas visitantes decidieron responder con una provocación directa hacia ellos y todos los que lo señalaron: “¡Argentina, Argentina!”.

Tevez jugó en las temporadas 2007/08 y 2008/09 en Manchester United
Carlos Tevez jugó en las temporadas 2007/08 y 2008/09 en Manchester United y también le dedicaron el cántico de "Argentina, Argentina" antes de que su relación con la hinchada se deteriorara con su partida al clásico rival, Manchester City

En aquel momento, con las tensiones posteriores a la guerra de Malvinas aún frescas, ningún argentino había jugado previamente en la liga inglesa desde que fue rebautizada en 1992, pero esa tendencia cambiaría a partir de 1998, con los arribos de Nelson Vivas, Fabián Caballero (Arsenal), Mauricio Taricco (Tottenham), Horacio Carbonari (Derby County), Juan Cobián (Sheffield Wednesday) y Gustavo Lombardi (Middlesbrough). Manchester United, por su parte, procedería a desarrollar una tendencia a contratar jugadores del país, empezando con Juan Sebastián Verón y luego siguiendo con Gabriel Heinze, Carlos Tevez y Ángel Di María, entre otros. Cada uno de ellos fue recibido con el canto que encolerizaba a los aficionados rivales.

No obstante, aunque sus rendimientos tuvieron altibajos, la mayoría de ellos disparan recuerdos negativos entre los hinchas Red Devils. Verón y Di María resultaron ser inversiones muy costosas y de bajo beneficio. Heinze dañó las relaciones con el club permanentemente al intentar forzar un pase a Liverpool, uno de los rivales acérrimos, sin éxito (luego recalaría en Real Madrid). Tevez sí logró ser traspasado al clásico de la ciudad, Manchester City, y festejó el título de la Premier League 2011/12 con un cartel con la leyenda “RIP FERGIE”, en alusión a la frase del entrenador de que no podrían ganarla mientras él viva.

Heinze, de Manchester United
Gabriel Heinze era querido por los fanáticos de Manchester United, pero esa relación se deterioró por sus intentos públicos de forzar un pase a Liverpool

El vínculo de Manchester United con la Argentina tuvo históricamente sus puntos altos y bajos, pero el resquemor hacia Inglaterra en general y su selección en particular funcionó como factor unificador que comenzó aquellas relaciones, y el 20 veces campeón inglés luego construyó sobre esa base. Es muy temprano todavía en la carrera de Lisandro Martínez para asegurar si podrá mantener esas buenas relaciones, pero las primeras impresiones son más que positivas. Después de todo, escuchar el “Argentina, Argentina” bajando desde las tribunas de Old Trafford, según lo dicta la historia, es un gran augurio.

La bandera que le hicieron los fanáticos de Manchester United a Lisandro Martínez por sus muy buenos desempeños en la Premier League
La bandera que le hicieron los fanáticos de Manchester United a Lisandro Martínez por sus muy buenos desempeños en la Premier League