Los Pumas 7s, a los cuartos de final: de la jugada a lo “Lomu” a la increíble salvada de Isgró

Los Pumas 7s completaron una gran primera fase en el Seven de Hong Kong y salieron airosos de un grupo que se planteaba difícil por la calidad de sus rivales y por lo que implica viajar a Asia, con la adaptación a los horarios y la aclimatación a un nuevo país. El equipo argentino tuvo respuestas en el juego, pero, sobre todo, respuestas mentales, haciéndose fuerte desde la cabeza. Además, se mostró muy sólido desde lo físico, un mérito enorme ante seleccionados fuertes en el contacto como los equipos del Pacífico. Victoria ante Samoa y derrota ante Fiji que, sumadas al triunfo inicial contra Canadá, le garantizaron avanzar a los cuartos de final, donde se encontrarán con Nueva Zelanda, este sábado, a las 23.02 de la Argentina.

Rodrigo Isgró, uno de los fundamentales de los Pumas 7s: “La vida de un jugador de seven es espectacular”

El duelo ante Samoa tuvo de todo, pero hay dos jugadas que pintan de cuerpo entero a este equipo. La primera, la de Luciano González, que se sacó de encima cuatro rivales como si fuese Johan Lomu en el Mundial de 1995. El riojano, característico por su potencia, fue imparable y terminó apoyando en el ingoal con su pelo platinado, una promesa que cumplió junto a algunos de sus compañeros tras el título obtenido en Vancouver. Argentina cuenta con una gran ventaja con esta clase de jugadores que ponen el equipo adelante.

La otra situación a resaltar es el enorme esfuerzo defensivo de Rodrigo Isgró. En la última jugada del primer tiempo, mientras los Pumas 7s estaban al frente 19-7, el mendocino alcanzó a Vaovasa Afa Sua, lo tackleó, y cuando se paró, nuevamente lo volvió a frenar, esta vez con la ayuda de Matías Osadczuk, que llegó oportunamente al cierre. Una acción que agrandó al equipo argentino y lo llenó de confianza para afrontar la segunda etapa.

El resultado final fue 26-19 gracias a las dos conquistas de Marcos Moneta y a la de Santiago Álvarez Fourcade, que abrió el marcador. Luego de tres caídas consecutivas en cuartos de final ante Samoa, cortaron esa racha en Los Ángeles y hoy volvieron a quedarse con un encuentro decisivo que les dio la clasificación a los cuartos de final.

Un traspié amargo

La derrota ante Fiji por 26-19 en el cierre de la fase de grupos dejó algunos sinsabores. Ya con ambos equipos clasificados, pudo haber inconscientemente una relajación y aunque mostraron buenas secuencias en ataque, Fiji quebró la defensa fácilmente y ganó varios duelos individuales. Pilipo Bukayaro, Joseva Talacolo y Napolioni Bolaca fueron los que más diferencia marcaron y le dieron la victoria a un seleccionado que siempre se hace fuerte en Hong Kong.

Las conquistas argentinas tuvieron una excelente gestación. El primero, un clásico kick al fondo que recuperó Marcos Moneta y definió Rodrigo Isgró, el segundo una buena maniobra que definió Germán Schulz y el último, cuando la derrota estaba consumada, una larga secuencia de pases que encontró a Matías Osadczuk en la punta. El juego de manos es una buena señal de la fase de grupos, con un clima que mejoró con respecto al primer día en el que superaron a Canadá por 17-7.

A partir de las 23:02 del sábado los Pumas 7s afrontarán un encuentro decisivo, que puede tener mucha influencia en el ranking de la temporada. Se verán las caras ante Nueva Zelanda, el líder, que cerró una zona de grupo muy positiva al derrotar a Kenia 29-5, Sudáfrica 12-7 e Irlanda 26-7. Los All Blacks 7s ganaron 13 de sus últimos 14 encuentros en el circuito y una victoria ante su escolta les daría un empujón hacia el título del World Rugby Seven Series, cuando aún restan tres etapas para el final. Santiago Gómez Cora sabe que el duelo será crucial para las aspiraciones de los Pumas 7s.

Los dos últimos antecedentes entre sí fueron ni más ni menos que en finales. En Hamilton, Argentina se impuso 14-12 de manera agónica, mientras que, en Los Ángeles, Nueva Zelanda se lo llevó por 22-12. Esta vez no será una final y todavía quedarán dos partidos más, pero en Hong Kong será el duelo que se lleve todas las miradas de los cuartos de final.