A prisión a pareja de Miami por exportar a México motores fuera de borda robados

Una pareja de Miami condenada por confabularse para exportar a México unos 600 motores fuera de borda robados con valor de millones de dólares ingresará en prisión en fechas escalonadas, según las sentencias dictadas esta semana por un juez federal.

Carlos Orlando Ledesma, de 57 años, jefe de almacén de la empresa naviera Netcycle Trading Corp, de Doral, ingresará en prisión en julio, tras ser sentenciado el martes a tres años por un juez federal de Miami. Su esposa, Nadia Esperanza Ledesma, de 46 años, presidenta de Netcycle Trading, tiene previsto comenzar su condena de un año y medio de prisión en mayo de 2025.

El juez de distrito Robert Scola también ordenó a los Ledesma, que admitieron en los acuerdos de culpabilidad que exportaron ilegalmente los motores fuera de borda, devolver $420,668 a las víctimas identificables del robo.

A principios de este mes, otros dos acusados que también se declararon culpables de la confabulación fueron sentenciados a cinco años cada uno. Se trata de Roberto Marrero-Cisneros, de 66 años y de de Miami, quien reconoció haber pegado números de serie falsos en los motores, pero que no trabajaba para la empresa de transporte de mercancías de la pareja, y Osmani Valdivia Pérez, de 56 años y de Lehigh Acres, quien admitió haber pagado en efectivo los motores fuera de borda, los números de serie falsos y su exportación ilegal.

Los acuerdos de declaración de culpabilidad de los cuatro acusados, que implicaban la cooperación con las autoridades, fueron firmados por los acusados y sus abogados: Rick Yabor, Renier Díaz de la Portilla, Peter Heller y Omar López.

Los motores de las embarcaciones fueron robados en el suroeste de la Florida y otras partes del estado, y luego enviados ilegalmente a través del agente de carga del área de Miami a México entre 2015 y 2018, según los acuerdos de culpabilidad. Los fiscales estimaron que el esquema resultó en una pérdida de entre $9.5 millones y $25 millones.

Muchos de los motores robados fueron exportados ilegalmente a Tomás Vale Valdivia, quien estaba radicado en México y financió el esquema ilícito de tráfico y envío, según la Fiscalía Federal. En un caso separado, fue sentenciado a principios de 2020 a casi cinco años de prisión por tráfico ilícito de migrantes a Estados Unidos. Es sobrino de Osmani Valdivia Pérez y no está acusado en el encausamiento de Miami.

El encausamiento —basado en registros supuestamente falsificados junto con imágenes de videovigilancia— afirma que Nadia y Carlos Ledesma recibieron de Osmani Valdivia y otros al menos 20 motores fuera de borda robados y los enviaron ilegalmente a México. Pero los fiscales destacaron en un comunicado de prensa que los Ledesma exportaron ilegalmente a México unos 600 motores fuera de borda robados durante ese período.

“Decenas de personas entregaron los motores robados” a la empresa de transporte de los Ledesma, según el comunicado de prensa. “Los motores tenían daños visibles causados durante el robo, y los cables y líneas habían sido cortados en lugar de ser desprendidos correctamente”.

Los Ledesma y sus cómplices crearon facturas de venta falsas y presentaron etiquetas de exportación falsas al gobierno federal, según el el encausamiento.

La investigación fue dirigida por Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) y el Servicio Guardacostas, y procesada por los fiscales Ana María Martínez y Darren Grove, de la Fiscalía Federal.

En el encausamiento no se aclara si los motores fueron robados de embarcaciones a motor desguazadas guardadas en viviendas, puertos deportivos o concesionarios de yates. Pero el número es asombroso en un estado donde los motores fuera de borda son una mercancía candente en el mercado negro, dicen las autoridades.

La Florida, que ocupa el primer lugar entre los estados con más robos de embarcaciones, lleva un registro de los robos de motores. Un análisis de CNBC de los registros compilados por la FWC mostró un total de 811 robos de motores en 2016, en comparación con 643 en 2015. Aproximadamente la mitad de los motores robados eran Yamaha.

El área de Miami es la No. 1 del país en embarcaciones robadas, seguida de Tampa, Fort Lauderdale, Orlando y Tavares.

“Desafortunadamente, con la cantidad de vías navegables que tenemos en Miami-Dade, es un entorno rico en objetivos”, dijo el policía de Miami-Dade Miguel Espinosa a CNBC. “Y es triste decirlo, es muy fácil robar una embarcación. O motores, especialmente motores”.

En 2020, una empresa de construcción de embarcaciones de lujo de Sarasota, Yellowfin Boats, informó que le habían robado material por valor de unos $400,000 mientras la tienda estuvo cerrada durante el fin de semana del Memorial Day. Los ladrones se llevaron varios motores fuera de borda. Al mismo tiempo, se denunció el robo de un camión Isuzu blanco de plataforma en la empresa vecina Coating Application Technologies. La Policía sospecha que el camión pudo haberse usado para transportar los motores fuera de Yellowfin.