La presión de Joao Félix

Majadahonda (Madrid), 13 ago (EFE).- Ya cerca de los 23 años, que cumplirá el próximo mes de noviembre, a las puertas del Mundial de Qatar 2022, en su cuarta temporada en el Atlético de Madrid, el nuevo curso presiona a Joao Félix, a la espera de su eclosión definitiva e incontestable en el equipo rojiblanco, en la selección portuguesa y en el fútbol mundial, tan perceptible por sus indudables cualidades, pero aún pendiente por su inconstancia.

Revelado como un líder en el tramo final del pasado curso, cuando la derrota contra el Levante en el estadio Wanda Metropolitano (0-1) lo puso todo en duda en todo el equipo, cuando resurgió e impulsó a su equipo con siete goles y tres asistencias en los últimos 14 partidos que disputó de la temporada, antes de lesionarse en el primer tiempo en casa contra el Espanyol hasta el fin del ejercicio, es el momento de Joao, titular desde el primer minuto de LaLiga Santander contra el Getafe, precisamente el equipo contra el debutó.

Aquel día, 18 de agosto de 2019, en el estadio rojiblanco, permanece en la memoria colectiva por la jugada que elaboró desde su campo, con un túnel incluido, cuando sorteó adversarios a golpe de regates y velocidad hasta que fue derribado en penalti en el área contraria. Lo lanzó Álvaro Morata y lo paró David Soria. El Atlético venció 1-0, porque ya había marcado antes el delantero madrileño, reencontrado también este domingo con Joao en la titularidad. Antoine Griezmann, Matheus Cunha y Ángel Correa serán suplentes.

Desde entonces hasta ahora, Joao ha atravesado una montaña rusa en el Atlético, entre alguna acción maravillosa, un puñado de partidos estupendos, las lesiones inoportunas, la perdida de la titularidad, la desconfianza, algún desentendimiento con su técnico y 109 partidos, con 28 goles y 15 asistencias. Un gol cada cuatro partidos de media. Es casi la mitad que en el Benfica, cuando promediaba uno cada 2,15 encuentros, antes de ficharlo por 127 millones.

Ha sido un jugador a rachas hasta ahora, que tan pronto concentraba cuatro o seis goles en un determinado número de partidos consecutivos como desaparecía de las estadísticas anotadoras de su equipo durante un tiempo, también con el matiz de que alguna lesión, como los reiterados golpes sufridos en el tobillo derecho en 2020-21, cuando fue campeón de la Liga, lo mermaron de forma clave para no alcanzar cifras más altas y esperadas.

EL PRIMER MUNDIAL A LA VISTA

Su tope goleador en una temporada con el Atlético, hasta ahora, está en diez tantos. Su límite de asistencias, en seis. Las ocho dianas que marcó la pasada campaña, seis de ellas esenciales para su equipo en ocho encuentros consecutivos, entre la derrota por 0-1 con el Levante y su lesión frente al Espanyol, cuando abrió los triunfos contra Osasuna (0-3), Betis (1-3), Cádiz (2-1) y Alavés (4-1). Doce puntos sin los que la Champions habría sido inviable.

Ya fue tan "determinante" como le exige Simeone. "Lo que necesito de vos es lo que estás haciendo", le transmitió el técnico al descanso en la victoria por 2-0 contra el Barcelona de la pasada campaña, cuando su fútbol desbordó al conjunto azulgrana, el 2 de octubre de 2021, cuando intervino decisivamente en las dos acciones de gol del Atlético, una anotada por Thomas Lemar y otra por Luis Suárez, en las que participó de forma crucial.

En el cambio posterior, desde el pasado febrero, cuando se descubrió como líder dentro del terreno de juego, Simeone enfocó a la implicación del futbolista en las necesidades del equipo, en el sentido colectivo que había trasladado a sus indiscutibles condiciones individuales, al que ha dado continuidad desde entonces, preparado para dar el salto que todo el mundo espera de él, además con su primer Mundial a la vista. Dentro de 99 días.

Aún no había irrumpido ni siquiera en el primer equipo del Benfica (jugaba con el filial y el juvenil) cuando se jugó al anterior Copa del Mundo en Rusia en 2018. Después de aquel verano sí empezó su recorrido con la plantilla profesional, al tiempo que jugaba con la selección portuguesa sub'21. Su debut con la absoluta se produjo el 5 de junio de 2019, un año después, cuando sus 20 goles en 43 partidos con el Benfica asombraron al mundo.

Entonces fue titular a las órdenes de Fernando Santos, igual que en varios de sus primeros compromisos como internacional (nueve de sus primeros catorce choques con Portugal los inició desde la alineación titular), aunque después fue perdiendo el sitio entre los once elegidos por el seleccionador, entre las lesiones que lo mermaron de forma determinante. En la Eurocopa 2020, afectado por el dolor en el tobillo, jugó 34 minutos en todo el torneo.

Y en los últimos cuatro duelos disponible para Fernando Santos fue suplente en los cuatro, contra Irlanda y Serbia, primero, en la fase de clasificación para el Mundial, y contra Turquía y Macedonia, después, en la repesca que clasificó a su selección para Qatar 2022, donde apunta Joao Félix, a presión, con todo el mundo expectante ante su eclosión definitiva.

Iñaki Dufour

(c) Agencia EFE