Polémica en el rugby inglés, con temores por el Mundial y con los Pumas en el horizonte: el riesgo del uso de las redes sociales

La jugada de la polémica: Ashton con la pelota, defendido por Hogg y por Woodburn, que luego recibirá amarilla, la segunda, y será expulsado
La jugada de la polémica: Ashton con la pelota, defendido por Hogg y por Woodburn, que luego recibirá amarilla, la segunda, y será expulsado - Créditos: @Redacción LA NACION

El deporte y las redes sociales. Una manera de relacionarse con los fans, de generar vínculos con las empresas y promocionar productos, de comunicar noticias de cualquier índole, personales o profesionales. También, de propiciar algún problema o conflicto, a partir de una opinión, crítica y comentario desmedidos. Es el mundo de estos tiempos: muchas veces, las grandes novedades se disparan a partir de un posteo por Instagram, por Twitter o por Facebook.

El rugby argentino se vio, hace unos años, sacudido por una suerte de “carpetazo” que desempolvó tweets de tinte racista de algunos jugadores de los Pumas. Le costó, entre otras cosas y de manera temporaria, la capitanía de los Pumas a Pablo Matera, tal la polvareda que se había levantado.

El try de la polémica desde otro ángulo
El try de la polémica desde otro ángulo

Hoy, el revuelo, aunque en menor escala, está desatado en el rugby británico, en la antesala del Mundial de Francia, que comenzará el 8 de septiembre próximo. Inglaterra, curiosamente, será rival de los Pumas el sábado 9, en la apertura de la Zona D. Un duelo por disputarse en Marsella. Y el conflicto se dio a partir de un tweet de Jack Nowell, jugador del Exeter Chiefs. Una apreciación crítica sobre el referí en ocasión del partido con Leicester Tigers desató temores y movidas internas en la Rugby Football Union, pensando precisamente en el Mundial.

Es que los dirigentes son conscientes del uso constante de las redes sociales por parte de los deportistas. Videos, fotos, recuerdos, grabaciones en vivo. Mucha intimidad incluso. Es la forma de conectarse con el resto del mundo y con sus seguidores. Algunos cracks los tienen por miles y miles.

Por eso, es casi un hecho que los jugadores ingleses que formarán parte del plantel que participará en el Mundial de Francia, y que se enfrentarán con los Pumas en el debut, recibirán “nuevas instrucciones sobre el uso de las redes sociales durante el máximo certamen”. Aunque según averiguaciones hechas por el diario The Guardian, “no se les prohibirá utilizarlas”. El seleccionado es conducido por Steve Borthwick, que a fines de 2022 reemplazó en el cargo al afamado Eddie Jones.

Olly Woodburn, ya expulsado en la Premiership
Olly Woodburn, ya expulsado en la Premiership

Ahora bien, ¿qué hizo Nowell para disparar toda esta comidilla? El wing del Exeter acaba de cumplir 30 años. Es internacional. Debutó en la Rosa en 2014 y participó en el Mundial 2015. Y su exabrupto, para la mirada dirigencial, ocurrió luego del partido entre Exeter y Leicester, que él no jugó. Fue a partir de sus críticas al referí Karl Dickson, que le mostró una doble tarjeta armarilla a Olly Woodburn, su compañero de Exeter Chiefs, con la consecuente expulsión.

La jugada en cuestión fue muy polémica. Leicester ganaba por 22-12 cuando Jasper Wiese se filtró luego de un scrum. Y le pasó la pelota a Chris Ashton, que buscaba su try número 100 en la Premiership. El ala del Leicester se dirigió hacia la bandera cuando fue tackleado por Stuart Hogg antes de que Olly Woodburn llegara para unirse a él. El árbitro Dickson consideró que Woodburn se había zambullido sobre Ashton, lo que según el reglamento es penal. Y como eso impidió el probable try, recibió una tarjeta amarilla, la segunda del día, por lo que fue expulsado.

Nowell ha sido acusado de “conducta perjudicial para los intereses de la Rugby Football Union (RFU) y el juego” después de tuitear lo siguiente: “Estoy en estado de shock. ¿Qué demonios está pasando? Es una de las peores decisiones que he visto. JAMÁS”. El tuit ya ha sido borrado de su cuenta, pero la RFU hizo mención de cómo fue publicado a los más de 61.000 seguidores de Nowell. Luke Cowan-Dickie, hooker de Inglaterra y Exeter, también habló del hecho y añadió que “el rugby había perdido el rumbo”. En tanto, el centro Henry Slade sostuvo: “No tengo palabras”. Pero lo que hizo más ruido fueron las críticas de Nowell.

El wing inglés deberá prestar declaración este miércoles y su club aguarda con ansiedad la decisión que tome la RFU. Se teme que pueda haber una suspensión, en un momento en que el club debe disputar próximamente la semifinal de la Copa de Campeones contra La Rochelle. Observando los antecedentes, algo similar ocurrió en noviembre de 2021 con su compañero del seleccionado Anthony Watson, a quien finalmente sólo se le aplicó una sanción de una semana. Pero comparado con aquella vez, se teme que la RFU tome una medida más drástica por su política de castigar más severamente las críticas y los abusos en perjuicio de los oficiales de partido.

Rob Baxter, director de rugby de Exeter, fue muy crítico sobre la aplicación de las tarjetas rojas desde la última Copa del Mundo: cree que están destruyendo el juego. Baxter pidió “el fin de las tarjetas rojas” que llevan a un equipo a perder un jugador, diciendo que estaba frustrado por el número de grandes partidos que se desnaturalizan por una expulsión. “Todas las sanciones que se nos ocurren en el rugby consisten en expulsar a los jugadores del campo. Parece que estamos absolutamente deseosos de destruir todos los partidos.

El caso Nowell provoca inquietud en cercanías del Mundial. El fallo disciplinario sobre Watson llevó al sindicato a introducir en la RFU una política que apunte “al correcto uso de las redes sociales”. Se infiere, en ese sentido, que todos los jugadores de Inglaterra reciben orientación cada vez que llegan a la concentración para algún compromiso internacional: ventanas, Seis Naciones o Mundial.

La jugada que desató la polémica

Además, la Copa del Mundo tiene sus propias regulaciones al respecto. El reglamento de World Rugby establece que “todas las uniones, asociaciones, organismos de rugby, clubes y personas no publicarán ni harán que se publiquen críticas sobre la forma en que un oficial de partido ha dirigido un encuentro”.

En ese sentido, otros jugadores ingleses han tenido problemas tiempo atrás. Los casos más recordados son los de Nathan Hughes y Billy Vunipola: el primero por criticó a un panel disciplinario y el segundo defendió comentarios homófobos del australiano Israel Folau. Un portavoz de la RFU fue específico: “Nos comunicamos regularmente acerca de los valores del rugby, siendo el respeto uno de ellos. Y sobre todo, de la importancia de demostrarlo a nuestros referís”.