Yahoo Noticias La persecución del arcoíris en Qatar 2022 supera lo obsesivo
Tanto la FIFA como Qatar se afanaron en los meses previos al Mundial en explicar que las banderas arcoíris en apoyo al colectivo LGTBI no estarían prohibidas durante el torneo pese a que la homosexualidad es ilegal en el país árabe. No obstante, si no lo están, lo parece. O, al menos, los organizadores se muestran empeñados en que no aparezcan por ningún lado.
Las siete selecciones cuyos capitanes iban a lucir los brazaletes de la campaña One Love en defensa de la diversidad y la libertad sexuales emitieron un comunicado conjunto para anunciar que finalmente no lo harían después de que la FIFA les informara de que los jugadores que lo llevaran recibirían tarjeta amarilla.
Inglaterra fue la primera de esas selecciones en debutar y, en lugar del brazalete arcoíris, su capitán Harry Kane llevó otro pidiendo el fin de la discriminación en el encuentro ante Irán.
Precisamente el mismo día del debut de Inglaterra, se produjeron otros hechos en el duelo que disputaron Estados Unidos y Gales que demuestran que la persecución del arcoíris en Qatar 2022 supera lo obsesivo.
El periodista estadounidense Grant Wahl denuncia que los responsables de seguridad del Al Rayyan Stadium no le permitieron acceder al campo porque llevaba una camiseta con un balón de fútbol rodeado por la bandera arcoíris en apoyo a la comunidad LTBI.
Just now: Security guard refusing to let me into the stadium for USA-Wales. “You have to change your shirt. It’s not allowed.” pic.twitter.com/TvSGThMYq8
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“Tienes que cambiarte la camiseta. No está permitida”, cuenta el periodista en Twitter que le dijo un guardia de seguridad. En esta misma red social, Whal contó después que estuvo retenido durante casi media hora.
“Estoy bien, pero fue una prueba innecesaria. Estoy en el centro de medios, aún con mi camiseta. Estuve detenido durante casi media hora. Vamos gays”, escribió.
I’m OK, but that was an unnecessary ordeal. Am in the media center, still wearing my shirt. Was detained for nearly half an hour. Go gays 🌈 https://t.co/S3INBoCz89
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En un artículo que publicó en su página web, reveló igualmente que un responsable de seguridad le llegó a “arrancar a la fuerza el teléfono de las manos”, mientras que otro le explicó que su camiseta tenía un “mensaje político” y que por eso no estaba permitida. Posteriormente, llegó un responsable que se disculpó con él y le dejó marchar. También le pidió perdón un funcionario de la FIFA.
A ese mismo encuentro acudieron varios seguidores de Gales con gorros con la bandera arcoíris y curiosamente se les retiró solo a las mujeres al acceder al estadio.
Así lo denunció una de las seguidoras, Laura McAllister, que es además la excapitana de la selección femenina de Gales. Las imágenes del momento en el que le quitaron el sombrero fueron emitidas por la cadena británica ITV.
La propia McAllister explicó a la misma cadena su experiencia. “Señalé que la FIFA había hecho muchos comentarios sobre el apoyo a los derechos LGBTI en este torneo y les dije que veníamos de una nación donde nos apasiona la igualdad para todas las personas”, contó. “Insistieron en que, a menos que me quitara el sombrero, no se nos permitía entrar al estadio”.
Son solo unos episodios que muestran la prohibición encubierta de la FIFA y de Qatar al apoyo al colectivo LGTBI.
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