"Zidane, trae de vuelta a Ronaldo, por favor"

El Real Madrid presentó a Zinedine Zidane como técnico del primer equipo el lunes pasado y a partir de ese momento se puso en funcionamiento el entramado de medios de todo el mundo que buscan adivinar los jugadores que intentará contratar el conjunto merengue el verano que viene.

Todas las papeletas le caen a Kyllian Mbappé, quien ya estuvo en lo alto de la lista de deseados en el verano de 2017 y que, como siempre ha expresado su admiración por el club blanco, se presupone que a lo largo de su carrera llegará al Real Madrid. Tras el campeón mundial con Francia, la lista es amplia y variada, y depende el periódico que leas, cada mañana desayunarás con alguno –o varios– de estos nombres: Neymar, Hazard, Icardi, Kane, Erikssen, Pogba, Mané, Kanté, Sterling, etc.

Sin embargo, tras el incontestable hat-trick de Cristiano Ronaldo contra el Atlético de Madrid en la Champions League, seguro que al pasar la rotonda de Valdebebas en su primer día oficial de entrenamientos de vuelta en el Real Madrid, a Zidane algún aficionado le habrá gritado: “Zidane, trae de vuelta a Ronaldo, por favor”.

La exhibición del portugués dejó en evidencia a la directiva madridista que, tras ver a Ronaldo levantar su cuarta Champions League en cinco años en Kiev, decidió que era mejor disfrutar de 105 millones de euros que ofreció la Juventus por el delantero de 32 años, que seguir sufriendo los desplantes y malos modos de CR7 una temporada más.

Menos de 9 meses después, parece obvio que la directiva se equivocó. Nadie puede saber que hubiera sido de la temporada del Real Madrid si Ronaldo hubiera portado el 7 blanco este año en vez de Mariano, pero juzgando por las últimas nueve temporadas y estimando algo similar a lo que ha conseguido hasta ahora en su primer curso como bianconeri, podemos inferir que los merengues hubieran contado con el killer de categoría mundial que tanto han necesitado.

Hace unos días Ronaldo recordó que sólo dejó amigos en Madrid, un lugar donde tuvo los mejores años de su carrera y donde fue realmente feliz. A esas palabras se agarra el madridismo para soñar con un retorno estelar del portugués al Bernabéu.

Puestos a soñar, el madridismo podría imaginar que si el Real Madrid vio bien vender al ganador de cinco Balones de Oro por 105 millones a los 32 años, quizás la Juventus, tras levantar la Champions League estaría dispuesto a vender a su estrella por una cifra cercana a los 150 millones. Al fin y al cabo, Ronaldo estaría rondando los 34 años y, realísticamente hablando, ¿cuántos años más de carrera pueden quedarle al más alto nivel?

Con ese regreso el equipo merengue repondría el error histórico cometido al malvender al máximo goleador del club y al hombre que volvió a encumbrar a la entidad a los altares del fútbol europeo. Un rematador de raza, un guerrero del área, que además es un líder nato y uno de los pocos jugadores que impone sobre el campo de juego simplemente con su presencia.

Claro, el problema es que todas esas cosas que el Real Madrid pasó por alto tras nueve temporadas con el portugués en su plantilla, es algo que en Turín tienen muy claro, por lo que la pregunta verdadera que se nos presenta es: ¿Por qué iba a vender la Juve a su mejor activo tras disfrutarlo sólo una temporada?

Lo cierto es que Ronaldo no tiene precio. El Real Madrid tenía una cláusula en el contrato del portugués por la cual el jugador podía comprar su libertad a cambio de 1.000 millones de euros, y sin embargo dejaron que se les escapara por poco más de un 10 por ciento de esa cantidad. La Juventus no incluyó ninguna cláusula de rescisión en su contrato de cuatro años, como es costumbre en Italia, y seguramente no cometerían el mismo error que la directiva blanca dejando salir a su gran estrella por un puñado de euros.

El madridismo deberá por lo tanto seguir soñando, y enfocándose en jugadores que sí puedan estar a su alcance. Ya sabes: Mbappé, Neymar, Hazard, Icardi, Kane, Erikssen, Pogba, Mané, Kanté, Sterling, etc. Cualquiera menos el mejor –Cristiano Ronaldo.

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