Anuncios

La verdadera situación de la tecnología 5G en España

La implementación de la tecnología 5G lleva meses en boca de todos, aunque sus implicaciones o sus requisitos todavía no están del todo claros para una gran parte de la población. Esta tecnología promete “cambiarnos la vida” gracias a una velocidad de conexión a Internet mayor, una latencia —tiempo de respuesta de la web—mucho menor y la posibilidad de multiplicar exponencialmente el número de dispositivos conectados.

Además, llega en un momento ideal para el desarrollo digital, un contexto en el que la pandemia ha obligado a traspasar actividades de todo tipo del plano presencial al virtual. Aunque las operadoras en España han estado anunciando el despliegue de sus redes móviles desde el año pasado, lo cierto es que la situación real todavía no es lo que parece.

La primera de ellas fue Vodafone, que ya anunció en 2019 en lanzamiento de su red 5G, en línea con su objetivo de “mantenerse a la vanguardia tecnológica” y afirmando con seguridad que el mercado ya estaba lo suficientemente maduro como para poder desplegar este nuevo servicio. Telefónica, Orange y MásMovil se han unido a la batalla del 5G en el último mes, bajo el pretexto de que las condiciones ideales para el desarrollo de este servicio ya se están dando, con una tecnología que lo permite y una disponibilidad de terminales suficiente y a precios razonables.

El 5G llega en un momento ideal para el desarrollo digital, en un contexto en el que la pandemia ha obligado a traspasar actividades de todo tipo del plano presencial al virtual. Foto: Getty.
El 5G llega en un momento ideal para el desarrollo digital, en un contexto en el que la pandemia ha obligado a traspasar actividades de todo tipo del plano presencial al virtual. Foto: Getty.

Sin embargo, los expertos en telecomunicaciones afirman que, pese a la insistencia de las compañías, el ecosistema 5G todavía está muy lejos de estar maduro y que las aplicaciones reales de esta nueva tecnología no son las que las operadoras están ofreciendo. Entonces, ¿cuál es la motivación real de estas empresas para desplegar este servicio? ¿Se trata de una anticipación estratégica o de puro marketing?

El 5G requerirá de inversiones masivas para su funcionamiento

La infraestructura actual y en la que se están apoyando las operadoras para sus redes no permite, por el momento, alcanzar todo el potencial real del 5G. Esto, unido al poco número de terminales en el mercado capaces de soportar esta tecnología, hace dudar de la utilidad real del nuevo servicio anunciado por las telecos.

El 5G anuncia una velocidad de conexión capaz de descargar una película en cuestión de segundos, ver retransmisiones deportivas como si se estuviera presencialmente en el estadio o jugar desde el móvil como si del ordenador o la videoconsola se tratase. A diferencia de las generaciones anteriores, que introdujeron innovaciones como los SMS o la simple posibilidad de conectarse a la red, el 5G no se centra solo en los teléfonos móviles; es decir, no solo beneficiará a los smartphones, sino a muchos otros dispositivos.

El 5G será fundamental para el desarrollo de las smart cities, servicios empresariales y de administraciones públicas en áreas como automoción, sanidad, emergencias o energía, así como nuevos modelos de negocio vinculados al conocido “Internet de las cosas”. Se prevé que, en unos años, vehículos, robots industriales, mobiliario urbano o cualquier dispositivo electrónico que tengamos en casa podrá conectarse a la red y compartir información.

Sin embargo, ninguna de estas aplicaciones será posible hasta que contemos con una infraestructura totalmente desarrollada, lo que requerirá una inversión masiva que podría llegar hasta el 50% de los fondos públicos, teniendo en cuenta que no es el usuario final el que la va a costear. Hasta entonces, se podrá servir para disfrutar de una mayor velocidad a la hora de jugar en línea, consumir contenido audiovisual en streaming o hacer videollamadas, por ejemplo, pero siempre sabiendo que todo su potencial todavía está por desarrollarse.

Lo que está claro es que el 5G representa un avance sin retorno, un paso adelante hacia la sociedad hiperconectada que nos espera en un futuro próximo. Lo más probable es que esta infraestructura sostenga todas las operaciones del mundo de aquí a unos años, lo que justifica el deseo de las operadoras de no quedarse al margen de esta disruptiva tecnología. Además, el hecho de que las t operadoras españolas apuesten por ir desplegando este sistema podría ser crucial para España, pudiendo situar a nuestro país - aver si esta vez sí- a la vanguardia de la innovación tecnológica.

También de interés

VIDEO | La Unión Europea quiere evitar el monopolio de Huawei en el despliegue de las redes 5G

Laotracaradelamoneda

IDNET Noticias