Trinidad: Último de una larga lista de atletas que pasaron de la gloria a la ruina

Félix “Tito” Trinidad podría perder todo su activo si progresa una demanda en su contra en Puerto Rico. (Foto: Reuters/Oswaldo Rivas)
Félix “Tito” Trinidad podría perder todo su activo si progresa una demanda en su contra en Puerto Rico. (Foto: Reuters/Oswaldo Rivas)

La noticia sobre los problemas financieros por los que atraviesa el ex campeón mundial boricua Félix “Tito” Trinidad trae una vez más a la palestra pública los numerosos casos de atletas que ganaron cuantiosas fortunas durante sus carreras y luego terminaron en la miseria total.

Trinidad encara un pleito legal contra uno de los principales bancos de Puerto Rico. La institución bancaria reclama una deuda cercana a los $21 millones como resultado de malas inversiones. El otrora campeón wélter, superwélter y mediano ripostó con una contrademanda en la que reclama $26 millones.

El púgil insiste en que el responsable es un ex asesor y traductor José “Pepe” Ramos, quien supuestamente realizó malas inversiones sin su consentimiento ni el de su padre, del mismo nombre, lo que tuvo como consecuencia la petición de préstamos millonarios al banco.

Se cree que Trinidad amasó una fortuna de sobre $80 millones. El banco insiste en cobrar el dinero por concepto de los préstamos o de lo contrario iría contra los activos del ex ídolo boricua, lo que podría significar su ruina.

La triste situación por la que atraviesa Trinidad es el más reciente capítulo de una larga lista de atletas que, sea por malas inversiones o derroche desmedido, vieron cómo se esfumaba el capital que adquirieron gracias a sus brillantes carreras.

A continuación, algunos atletas que pasaron de la gloria a la ruina.

Mike Tyson

Es, quizás, uno de los casos más recordados debido a la dramática caída de uno de los hombres más temidos del boxeo.

Según reportes, Tyson alcanzó una fortuna de sobre $300 millones. Sin embargo, el gasto desmedido en joyas, lujosas residencias y exuberancias como animales exóticos, entre otros, poco a poco fueron mermando su capital. Además, Tyson cayó en las garras de la cocaína, lo que hizo perder gran parte de su fortuna y también dejó una enorme suma de dinero en su defensa legal luego que fuera acusado de violación sexual en 1992.

Tyson se declaró en quiebra en el 2003 con deudas que sobrepasaban los 27 millones.

Marion Jones

La ganadora de tres medallas de oro y dos de bronce en las Olimpiadas de Sydney 2000 vivía su mejor momento como embajadora de arcas y cobraba una enorme suma por carrera. Pero luego del 2007 todo se vino abajo, cuando confesó haberse inyectado esteroides durante los Juegos.

La corredora estadounidense tuvo que devolver todas sus medallas, pagar cuantiosas multas y hasta cumplir seis meses de cárcel por el incidente. La situación económica de Jones fue tal que le embargaron su residencia valorada en más de $2.5 millones y hasta tuvo que vender la casa de su madre.

Scottie Pippen

El ex estelar canastero de los Bulls de Chicago logró una fortuna de sobre $110 millones, pero las malas inversiones en la industria de la aviación, comida gourmet y hasta un complejo de viviendas de lujo lo llevaron prácticamente a la calle.

El seis veces campeón de la NBA y medallista de oro en las Olimpiadas de Barcelona 1992 tuvo que jugar en ligas internacionales de menor calidad para intentar ganar algo de dinero y mantenerse a flote. Actualmente trabaja en los Bulls de Chicago.

Curt Schilling

El ex lanzador de las Grandes Ligas perdió prácticamente toda su fortuna en una fallida inversión que hizo en una compañía de videojuegos llamada “38 Studios” que fracasó estrepitosamente.

La empresa se declaró en bancarrota en el 2007, luego que un banco estadounidense demandó al ex pitcher de los Medias Rojas de Boston por un préstamo de $75 millones que tomó a nombre de la empresa.

Informes indicaron que Schilling se vio en la necesidad de subastar la famosa media manchada de sangre que utilizó mientras lanzó el segundo partido de la Serie Mundial del 2004 para poder pagar parte de sus deudas.

Kenny Anderson

De ganar $60 millones en su carrera a declararse en bancarrota, así transcurrió la vida de Kenny Anderson una vez se retiró de la NBA. Se dice que el ex canastero se casó tres veces y pagaba la manutención de sus siete hijos y dos de sus esposas, además de comprar lujosas propiedades en sitios exclusivos y una enorme colección de autos.

Además, gustaba derrochar dinero a granel. Informes de prensa apuntan a que Anderson separaba de su dinero $10,000 al mes solo para gastarlo con sus amigos.

Al momento de declararse en bancarrota, sus gastos mensuales sumaban $41,000.

Iván Zamorano

El otrora estrella del fútbol chileno, quien tuvo una exitosa carrera en el Real Madrid y el Inter de Milán, entre otros clubes, se vio en medio de una difícil situación económica, luego que se supiera que debía más de $3 millones por créditos, relacionados con una ciudad deportiva que lleva su nombre en Santiago.

Zamorano se vio en la necesidad de vender sus autos de lujo y hasta 14 apartamentos que tenía a su nombre para intentar salir a flote.