El título de Cerro Porteño en plena pandemia, lo mejor de un año atípico

Asunción, 18 dic (EFE).- Con la mayoría de los deportes en paro por la pandemia de coronavirus, destacó la campaña del Cerro Porteño hacia la conquista del torneo Apertura paraguayo con partidos a puerta cerrada, lejos del calor de los hinchas y en pleno auge de nuevos casos de contagio.

La llegada del virus a inicios de marzo marcó un antes y un después para el equipo azulgrana, ya que antes del parón no estaba entre los favoritos como el Libertad o el tetracampeón Olimpia por la distancia de éstos en la cima de la tabla.

La pandemia cerró la cortina de la Liga con el Ciclón de Barrio Obrero inmerso en mitad de tabla, en el sexto lugar, con 12 puntos a siete del entonces líder, el Libertad del argentino Ramón Díaz, y a tres del segundo, el Olimpia, su tradicional rival.

Además los de Francisco Arce acababan de ser apeados de la fase previa de la Copa Libertadores por el Barcelona ecuatoriano tras la goleada por 0-4 que sufrieron en su propio estadio.

Pero once triunfos seguidos, un empate y otra victoria catapultaron el vuelo azulgrana tras el forzado receso de tres meses que paralizó el fútbol en la región.

Y volvió al título tras ganar el Clausura de 2017 con el colombiano Leonel Álvarez, tras una sequía de casi tres años en la que se sucedieron el argentino Luis Zubeldía, el español Fernando Jubero y el actual entrenador del Boca Juniors, Miguel Ángel Russo.

El éxito deportivo del exseleccionador Arce se fundó en la disciplina táctica de sus dirigidos, la contundencia ofensiva de los argentinos Federico Carrizo y Diego Churín, que cerrará el año en el Gremio brasileño, y el oficio del portero uruguayo Rodrigo Muñoz.

A ello se suma el aporte de talentosos jugadores de la cantera que ganaron la confianza de Arce como Alexis Duarte, de 21 años, titular indiscutible en la zaga central y candidato a ser llamado por la selección que disputa las eliminatorias del Mundial de Catar 2022.

El Olimpia, el Cerro Porteño, el Libertad y el Guaraní son los equipos de mayor presupuesto del país y la proyección de uno de ellos incide indirectamente sobre la conducción técnica de los demás dado que su duración depende de resultados.

Así, el argentino Daniel Garnero, ganador de los últimos cuatro torneos de Liga con el Olimpia, fue una de las víctimas del efecto colateral del brillo azulgrana, aunque en su alejamiento del cargo incidió además el mal desempeño en la Copa Libertadores, de la que el 'Rey de Copas' paraguayo ha sido tres veces campeón.

(c) Agencia EFE