La selección argentina: diez nombres para el arco en el ciclo de Scaloni y todavía no hay dueño

La selección argentina arranca su camino rumbo al Mundial de Qatar sin saber quién será su arquero. Es el puesto que más recambio tuvo en todo el ciclo de Lionel Scaloni: diez nombres en total. En ningún otro lugar del campo hay más oportunidades que en el arco, donde la inactividad de Sergio Romero en Manchester United, el último en adueñarse del buzo, abrió el juego al resto de los pretendientes.

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Uno de ellos, el marplatense Emiliano Martínez, era un desconocido para el gran público argentino, que lo descubrió atajando para Arsenal, de Inglaterra. Ahora juega en Aston Villa, una de las revelaciones de la Premier League. Y ese presente en el exterior puede llevarlo a desplazar a dos arqueros mucho más conocidos para los hinchas: Esteban Andrada, de Boca, y Franco Armani, de River. Ni más ni menos.

El guardavallas millonario es el que más minutos tuvo en cancha de los diez convocados para el arco. También rindieron examen Agustín Marchesín (lesionado, se cayó de la convocatoria para esta doble fecha), el propio Andrada, Romero, Paulo Gazzaniga (es el suplente del francés Hugo Lloris en el Tottenham inglés), Gerónimo Rulli (Villarreal, de España) y Juan Musso (Udinese). Este último acaba de ser reemplazado de la lista final debido a una rotura de menisco. En su lugar viajará Jeremías Ledesma (Cádiz, de España). Ledesma, Guido Herrera (ex Talleres de Córdoba, hoy en Turquía) y Martínez son los tres arqueros que, hasta acá, estuvieron en alguna lista, pero no salieron a la cancha.

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Ser el arquero titular en el debut del seleccionado rumbo a la cita qatarí sería para Martínez el colofón del mejor año de su carrera deportiva. El marplatense fue ojeado por Miguel Angel "Pepé" Santoro, quien lo llevó a la pensión de Independiente y lo formó como arquero. A los 16 años dejó Avellaneda rumbo al objetivo de su vida: hacerse un nombre en Europa. Firmó en Arsenal como una apuesta a futuro. Una cesión tras otra a clubes de categorías de ascenso le moldearon el carácter. En la última, durante la temporada 18-19, fue el arquero con mejores números de toda la Championship, la segunda categoría del fútbol inglés. Allí jugó con la camiseta de Reading, y sus actuaciones sirvieron para que Arsenal lo tuviera en cuenta como suplente de Bernd Leno, el dueño del arco.

Pero así como Romero no juega en Manchester United y por eso perdió el arco argentino, Leno se lesionó al final de la pasada Premier League. Si algo había aprendido "Dibu" (le dicen así porque cuando llegó a la pensión de los Rojos tenía la tez colorada y pecas, por lo que se parecía al dibujo animado que se puso de moda en los 90), era a estar listo para aprovechar cualquier oportunidad disponible. En el país de los inventores del fútbol es "Emi". Y para muchos expertos del arco es uno de los mejores en su puesto. Por eso, después de ganar la FA Cup y de atajar en la Premier se puso otro objetivo: ser arquero titular. Sentía que estaba listo. Arsenal, sin embargo, lo vendió. Los 20 millones de libras (21,5 de euros) que Aston Villa pagó por él lo hicieron el arquero argentino más caro de la historia.

El último fin de semana, Martínez y su equipo golearon a Liverpool, último campeón de la Premier. Ese presente de éxito y ese pasado de sacrificio y esfuerzo es el que puede premiar Scaloni al darle la titularidad al guardavallas crecido bajo la tutela de "Pepé" Santoro, lejos de las playas marplatenses. Una fortaleza es el juego con el pie. Esa ductilidad le viene de sus primeros años, cuando dominar la pelota y eludir rivales era fundamental para su tarea en la cancha. Era delantero en la categoría de su hermano, dos años mayor.

En menor medida, la Argentina también tiene otro interrogante en la mitad de la cancha. Los músculos de Giovani Lo Celso pedían un descanso y la salida del futbolista de Tottenham abre un lugar en la formación titular. Marcos Acuña (Sevilla), Eduardo Salvio (Boca) y, en menor medida, Alejandro "Papu" Gómez, se postulan para ese lugar. Acuña podría ser volante interno, liberando a Lucas Ocampos para que juegue más arriba con Lionel Messi y Lautaro Martínez. Salvio, en cambio, jugaría por la derecha en un 4-4-2 bien definido con Ocampos en la otra banda. El ingreso del Papu, en cambio, lo llevaría a jugar más cerca de Messi y Lautaro y un poco más lejos de la zona de gestación. En ese lugar, los números puestos son Rodrigo de Paul y Leandro Paredes, dos volantes mixtos que hasta hace un tiempo eran proyectos y hoy forman parte de la columna vertebral del equipo argentino.