San Martín de Tucumán: el desguace del líder de la Primera Nacional y un futuro que se definirá a través de un Zoom

Los hinchas de San Martín, de Tucumán, ya se habían hecho la película. Imaginaban que septiembre los encontraría en la Liga Profesional, con un plantel renovado, refuerzos rutilantes y la posibilidad de volver a enfrentarse con River, Boca e incluso Atlético, el rival de siempre. La tabla de posiciones alimentaba el sueño: estaban punteros de su zona, con los mejores números entre los 32 clubes de la Primera Nacional. De repente, la pandemia. Una resolución de la AFA, un reclamo ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) que tiene una audiencia fijada para el próximo miércoles, y un torneo que debería reiniciarse el 1° de noviembre. Sin formato definido. Luego de seis meses, a ese equipo ganador le queda sólo la cáscara: apenas cinco profesionales de trayectoria y una dupla técnica que ni siquiera regresó a Tucumán.

Todos juegan: la Primera Nacional, la polémica por el posible formato del torneo y lo que se espera desde Suiza

Cuando la AFA paró la pelota, anuló todos los descensos por dos años y decidió que los ascensos se resolvieran en la cancha. San Martín se sintió perjudicado. Acudió a los tribunales deportivos porque entendió que, en ese caso, el ascenso le correspondía en los escritorios. La AFA, de hecho, dio por "finalizada la temporada". El presente del club, sin jugadores, sin entrenadores, sin fútbol, abona la teoría que esgrimió ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo: "Los clubes de primera estarán interesados en contratar a los jugadores que ya no integran el plantel de primera. El interés se centrará en aquellos jugadores que mejor rendimiento tuvieron", dice el reclamo de los tucumanos. La premonición se cumplió: el Santo tiene 19 futbolistas menos que en marzo. La foto del club está en sintonía con el argumento legal.

"Al 30 de junio, el club tiene un déficit operativo de 25 millones de pesos", dice Roberto Sagra, el presidente de San Martín. Empresario del juego y ocasional compañero de póquer de Daniel Angelici, el directivo agrega: "Hasta que empezó la pandemia teníamos números positivos. Estábamos 5 millones de pesos arriba gracias a las entradas que pagaban los socios". San Martín funcionó como vidriera para muchos de sus jugadores, que después de una buena temporada eligieron otros horizontes: emigraron al exterior, a la Liga Profesional y a otros clubes de la categoría que les ofrecieron mejores sueldos.

"La foto de la tabla de posiciones en marzo perjudica a San Martín, de Tucumán. Si los ascensos del torneo que se estaba jugando se definen en la cancha no se tendría que haber abierto el libro de pases. Y menos para permitir contratos por 18 meses", protesta el presidente, a quien quisieron callar en AFA con denuncias ante el tribunal de Disciplina (el fallo absolutorio está pendiente de publicación) y el de Ética. "AFA no hizo más que agravar las consecuencias de la pandemia en clubes como el nuestro", agrega Sagra, que estuvo a punto de acompañar a Claudio Tapia, el titular de la AFA, en el armado del nuevo comité ejecutivo. El cortocircuito entre ambos hizo que el nombre del tucumano fuera borrado de la lista. Paradoja del destino: AFA y San Martín tuvieron ayer la mediación judicial porque el 'Santo' impugnó la asamblea en la que Tapia fue reelecto hasta 2025. El cónclave terminó sin acuerdo.

Más allá de las cuestiones legales y de escritorios, en Tucumán no se entrena nadie. Atlético, el rival de primera categoría de San Martín, debió detener las prácticas por la aparición de casos de coronavirus en su plantel. Las autoridades sanitarias de la provincia resolvieron retroceder de fase el 28 de agosto y el Comité Operativo de Emergencia (COE) provincial ya no permitió fútbol. Si los contagios disminuyen y la situación mejora, San Martín y Atlético podrán volver a los entrenamientos grupales y con distanciamiento social a mediados de mes, pero sin fecha de regreso a los partidos por los puntos. Ni en la Liga Profesional ni en la Primera Nacional. lo más parecido a una certeza es lo del 1° de noviembre, el día en el cual volverían los torneos de ascenso. Dicho así, siempre en potencial.

Pelea en la AFA y llamados a Suiza: las armas que usa San Martín de Tucumán para que el coronavirus no le arrebate el ascenso

El reglamento para esta temporada de la Primera Nacional establecía una final en estadio neutral para los equipos que terminaran primeros en sus zonas. El ganador de ese encuentro sería declarado campeón y ascendería. Si se hubiera respetado lo escrito, San Martín y Atlanta deberían protagonizar ese encuentro para resolver cuál subirá a la Liga Profesional. Ninguno de los formatos que la categoría tiene en estudio prevé esa posibilidad. La suerte de San Martín se resolverá por videoconferencia. Sus dirigentes y los de la AFA se reunirán el próximo miércoles con el panel de tres árbitros. El veredicto debería surgir en las semanas siguientes.

La decisión impactará en el resto de los equipos de la segunda categoría. No es lo mismo competir por dos ascensos que tener uno solo en juego (ocurriría si el club tucumano se quedare con el otro en los escritorios). El fallo del TAS puede cambiar el formato del torneo. Podría pasar, incluso, que el tribunal descartara el pedido de San Martín pero ordenara dirimir los ascensos con el partido final. En ese caso, en la Ciudadela ya tienen el teléfono preparado y los contactos aceitados para armar un equipo contrarreloj.