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Pro Bowl brinda oportunidad para cambiar de posiciones

jugadores defensivos de la AFC durante el entrenamiento previo al Pro Bowl el miércoles 22 de enero del 2020. (AP Photo/John Raoux)

LAKE BUENA VISTA, Florida, EEUU. (AP) — Cameron Heyward, de los Steelers de Pittsburgh trotó en la zona de anotación, extendió su brazo derecho y realizó una atrapada a una mano para empezar el entrenamiento del miércoles, previo al Pro Bowl.

Nada mal para un integrante de la línea defensiva.

A nadie debería sorprenderle ver a Heyward hacerlo de nueva cuenta el domingo, en el juego de estrellas de la NFL.

El año pasado, el encuentro anual pareció un partido de amigos. Las jugadas espectaculares y los cambios de posiciones fueron más prevalentes que los balones largos y la indiferencia a la defensiva.

“Definitivamente es más que un juego”, dijo el defensive tackle de Tennessee Jurrell Casey. “Trabajamos duro todo el año, nos golpeamos unos a otros, entonces venir y cambiar posiciones por una o dos jugadas no le molesta a nadie.

“Muchos de los chicos jugaron otras posiciones en el pasado, déjenlos salir y que jueguen con eso un poco”.

Casey hizo ya su petición. Le preguntó al entrenador de Baltimore John Harbaugh si puede realizar un acarreo en la línea de anotación.

“Solía jugar un poco como corredor”, dijo Casey, que mide 1.85 metros (6 pies y una pulgada) y pesa 136 kilogramos (305 libras). “Dijo que lo va a intentar pero que no quiere cambiar mucho el sistema. Seguiré intentando convencerlo toda la semana. Tienen que dejarme tocar el balón al menos una vez”.

No sería una sorpresa, tomando en consideración lo que ocurrió el año pasado en Orlando.

El cornerback de Jacksonville Jalen Ramsey atrapó un pase de anotación en los últimos segundos del triunfo de la Conferencia Americana por 26-7. El receptor de Tampa Bay Mike Evans bloqueó un pase e interceptó otro, en jugadas defensivas consecutivas.

Esta podría ser la evolución _ algunos la llamarían la involución_ del partido de exhibición que cada año es menos intenso. Hay muy pocos derribos violentos, si acaso se presenta alguno, y casi nada de contacto en la línea de golpeo. A veces parece más como una revisión de jugadas que un entrenamiento _toques a dos manos a lo mucho.

“Se supone que es divertido”, dijo el tight end de Atlanta Austin Hooper. “Es la razón de la NFL para que hacerlo _para que sea divertido. Entonces, ¿por qué no cambiar un poco las posiciones, dar a los aficionados algo que los emocione y que sea distinto?”.

No todos están de acuerdo en sólo divertirse, especialmente debido a que los jugadores del equipo ganador se llevan el doble de dinero _70.000 dólares en lugar de 35.000.

“Todos tienen el sueño de jugar otra posición”, reconoció el defensive end de Jacksonsville Calais Campbell. “Cuando tienes esos sueños, realmente debes convencer al entrenador. Pero cuando el resultado está en juego, sólo queremos ganar. No hay diversión si no cumples”.