Sainz sufre para mantenerse líder del Dakar y Alonso se mete en el "top 10"

Haradh (Arabia Saudí), 14 ene (EFE).- Solo 24 segundos salvaron este martes a Carlos Sainz (Mini) de perder el liderato del Dakar a falta de tres etapas para llegar a la meta final, mientras que Fernando Alonso (Toyota) continuó con su remontada y logró meterse entre los diez primeros de la clasificación general.

Sainz vivió su peor día en este Dakar. Había tenido un rally prácticamente impoluto sin percances serios ni raros hasta este martes, cuando en la novena etapa una rueda nueva pero aparentemente defectuosa se despedazó sin mayor razón tras 100 kilómetros de uso.

Por culpa de ese neumático hecho trizas, sumado a un pequeño despiste al inicio de la etapa, Sainz perdió prácticamente toda la renta que tenía ganada respecto al catarí Nasser Al Attiyah (Toyota), que hace dos días era de diez minutos y ahora se vio reducida a la mínima expresión, solo 24 segundos.

La etapa, disputada entre Wadi Al Dawasir y Haradh, en el sur de Arabia Saudí, se la adjudicó el francés Stéphane Peterhansel (Mini), que empató a Sainz a tres en etapas ganadas en este Dakar y se metió de lleno en la lucha por la victoria del rally, a solo 6 minutos y 38 segundos del español cuando hace dos días estaba a casi 20.

"Ha sido una pena. No ha salido el día como esperábamos, podíamos haber recuperado algo de tiempo y ha sido justo al contrario", lamentó Sainz al bajarse del coche.

"Es lo que hay, el Dakar es así y mañana habrá que seguir empujando", dijo resignado el piloto, al que la diferencia de 24 segundos sobre Al Attiyah le parece "anecdótica".

SIN MECÁNICOS PARA ETAPA MARATÓN

Para hacerlo más emocionante, los tres pilotos continuarán este miércoles su pelea en la etapa maratón, donde ningún competidor tendrá dispondrá de sus mecánicos y cualquier avería en los vehículos deberá ser reparada por la propia tripulación.

El recorrido de esta etapa será muy exigente para la mecánica, pues tendrá 534 kilómetros cronometrados por el "Cuarto Vacío" de Arabia Saudí, una extensión de 650.000 kilómetros cuadrados de desierto prácticamente deshabitada.

Al llegar a la meta los competidores deberán pasar la noche acampados sobre la arena del desierto, muy cerca de la frontera con los Emiratos Árabes Unidos, y dormirán allí para luego reanudar la marcha de nuevo a Haradh, un enclave ubicado sobre el mayor yacimiento petrolífero del mundo.

Para esta jornada Sainz, que busca su tercer triunfo en el Dakar tras sus victorias de 2010 y 2018, partirá en la quinta posición y su misión será alcanzar a Al Attiyah y a Peterhansel para volver a estirar su ventaja lo máximo posible.

ALONSO EN ASCENSO

Mejor ambiente se respiraba en el garaje de Fernando Alonso, porque el campeón de Fórmula 1 pasó con muy buena nota su primera etapa del Dakar en la que debía abrir pista y se metió entre los diez primeros clasificados del rally.

El asturiano, bajo la navegación de Marc Coma, fue el coche más avanzado de la caravana en esta etapa y le tocó encontrar el camino, una tarea que hace ir a un ritmo más lento que los de atrás, pero el Toyota Hilux de Alonso acabó en una posición aceptable, noveno de la etapa y a 13 minutos del tiempo de Peterhansel.

Es el cuarto día que Alonso termina entre los diez primeros de la etapa, lo que le ha llevado a estar también en ese "top 10" de la general, del que salió tras la segunda etapa por el accidente en el que perdió dos horas y media para reparar la estructura de una rueda golpeada.

"Creo que merecíamos estar en el 'top 10'. Estoy contento de estar ahí y ojalá que no lo perdamos en los próximos tres días", dijo Alonso.

La etapa maratón será para el ovetense una nueva aventura dentro del Dakar, una nueva oportunidad sobre dunas, un terreno que se le acomoda, para conseguir su primera victoria de etapa en el rally que administrará con cuidado porque reconoció que el cansancio comienza a pasar factura.

TRIBUTO DE QUINTANILLA DE GONÇALVES

Las motos reanudaron la competición después de la etapa cancelada este lunes en señal del luto por el mortal accidente que sufrió el día anterior el piloto portugués Paulo Gonçalves, a quien el chileno Pablo Quintanilla, ganador de la novena etapa, dedicó el triunfo.

Sin embargo, Quintanilla, que marcha segundo en la clasificación general, apenas pudo recortar diferencias sobre el estadounidense Ricky Brabec (Honda), que mantiene una cómoda ventaja para ganar su primer Dakar y así romper una racha de dieciocho años seguidos de victorias de motos de la marca austríaca KTM.

En quads el chileno Ignacio Casale logró su cuarta etapa ganada en esta edición del rally y tiene casi en su mano su tercer título tras los conseguidos en 2014 y 2018.

Fernando Gimeno

(c) Agencia EFE