Pan y circo
Dice la historia que los emperadores romanos mantenían al pueblo anestesiado de los asuntos trascendentales repartiendo pan y regalando entretenimiento masivo.
El fútbol como sedante
Para muchos intelectuales la religión es opio para el pueblo, para muchos estudiosos el fútbol es una religión. Pues bien, en estos días en los que los pueblos ya no reparten pan, la comida se convirtió en un lujo que no se regala, solo queda el circo.
Mientras más circo haya, y tenga un poder de penetración más alto, mucho mejor para los ineptos mandatarios que llevan las riendas del mundo.
Piqué como becerro de oro
Hoy, en el estadio mundialista José Rico Pérez de Alicante, en el mismo que la Polonia de Lato y Boniek le ganó a Francia el tercer lugar en España ’82; tuvimos la conjugación perfecta de mandatarios estúpidos y circo como opio, para un pueblo tonto.
Como dijo Otto von Bismarck, “La nación más fuerte del mundo es, sin duda, España. Siempre ha intentado autodestruirse y nunca lo ha conseguido. El día que dejen de intentarlo, volverán a ser la vanguardia del mundo”
La polarización de un pueblo dividido por dos bandos, que los manejan a su antojo como marionetas, tuvo hoy en la cancha a un chivo expiatorio que, con errores y aciertos, se ha atrevido a hacer lo que muy pocos hacen, ir de frente.
En el estadio en el cual España se clasificó con sobrados méritos, porque es un equipazo, al mundial Rusia 2018, después de golear a la débil Albania; fue más importante el momento en el cual Gerard Piqué tocara el balón, para que medio estadio le pitara e insultara, y el otro medio, la aplaudiera y respaldara.
Mientras esto sucedía, seguramente Rajoy, Puidgemont y el Rey, estaban echados en los sofás de sus palacios, colmados de comodidades que paga ese pueblo, esgrimiendo una sonrisa socarrona y preparando, cada uno, su próxima estrategia de manipulación colectiva.
La masa
Si acaso la masa llegase a empezar a organizarse, y significara amenaza real, pierdan cuidado, la próxima semana juega de nuevo España, la próxima semana tendrán de nuevo circo, y la cortina de humo disfrazada de balón, será de nuevo el opio que los mantendrá adormecidos como borregos.
Que triste que la ‘Madre patria’ le haya dejado a tantos pueblos alrededor del planeta, vicios sociales y políticos que se mantienen y fortalecen generación tras generación; corrupción, marrullería, trampa.
Pan y circo para el pueblo, mañana Piqué volverá a la cancha.
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