Anuncios

Murió Juan José Pizzuti: el adiós para el gran ídolo de Racing y clave en el fútbol argentino

Juan José Pizzuti, ídolo de Racing

El fútbol argentino llora a una de sus glorias: a los 92 años murió Juan José Pizzuti, ídolo de Racing y hacedor del primer equipo argentino campeón del mundo en 1967 contra el Celtic de Escocia.

"Racing Club lamenta profundamente el fallecimiento de Juan José Pizzuti, pieza indispensable en la historia del Primer Grande. La institución acompaña a su familia y afectos en este momento de dolor", comunicó el club para despedir a un hombre fundamental en la rica historia de la Academia.

Pizzuti disputó más de 200 partidos entre 1952 y 1962 y conquistó dos títulos como futbolista de la Academia de Avellaneda, pero sus mayores logros llegaron como entrenador con el título local de 1966, la Copa Libertadores 1967 y la Intercontinental de ese mismo ciclo. Entre otra cosas, además, el ideólogo del célebre "Equipo de José" marcó una época con su invicto de 39 partidos.

El recordado Tito nació en Barracas el 9 de mayo de 1927. Como futbolista inició su camino en Banfield, donde debutó en 1946 y se convirtió en goleador con 27 tantos en 1949. Luego pasó por River y Boca. En este último fue campeón local en 1962. A su vasto historial se le suma una conquista de la Copa América 1959 con el seleccionado nacional. En tanto que en la Academia jugó 215 encuentros hasta abril de 1962 y con sus 118 goles es el segundo máximo anotador en la historia del club, sólo por detrás de Evaristo Barrera, que tiene 136 tantos.

"El brillante estratega que, con el tiempo, pasó de la delantera al mediocampo, siempre le gustó definirse como un "obsesionado del gol", y aún arrancando desde atrás, marcaba con gran facilidad", lo definieron en Racing.

Pizzuti, en la tapa de El Gráfico

No obstante, Pizzuti también hizo historia grande como entrenador de Racing. Dirigió por primera vez al equipo el 19 de septiembre de 1965. Fue un triunfo por 3 a 1 ante River, en Avellaneda, con goles de Carlos Castillo y Juan José Rodríguez (2). Siempre apoyó a jugadores jóvenes; así comenzaron a tener posibilidades en el equipo Roberto Perfumo, Alfio Basile, Agustín Cejas, Rubén Díaz y Juan Carlos Cárdenas, entre otros.

En 1966 nacía un equipo símbolo, el de "José", el técnico que condujo a un equipo que se gestó en 1965 y que permaneció invicto por 39 fechas hasta culminar siendo el dueño del certamen de 1966 postergando a River -precisamente el que le cortó la racha de victorias, en el Monumental- y marcando, sin quererlo, una fecha con letras de molde en su rica historia: 20 de noviembre de 1966.

Poco tiempo después, ya en 1967, se hilvanarían la Copa Libertadores primero y la Intercontinental después, con el recordado gol del "Chango" Cárdenas, marcando un hito, frente a los escoceses del Celtic, en Montevideo. Fueron tiempos de gloria. Los de Cejas, Perfumo, Díaz, Oscar Martín, Basile, Nelson Chabay, James Donald Martinolli, Juan Carlos Rulli, Cárdenas, Juan José Rodríguez, Joao Cardoso, Norberto Santiago Raffo y Humberto Maschio, entre otros. Un conjunto de hombres extraordinarios.

Pizzuti junto con otras glorias de Racing y Mostaza Merlo, el DT campeón en 2001

"Teníamos a todos los uruguayos en contra, pero ya lo sabíamos. El equipo ya había pasado muchísimas situaciones de adversidad anteriormente y había respondido. Para ese grupo era lo mismo jugar acá o en la China, porque tenía una gran confianza en lo que podía dar" explicó Pizzuti a LA NACION en 1997, en una entrevista a 30 años de la gesta.

El cuerpo técnico, además del entrenador Pizzuti, estaba conformado por Rufino Ojeda (preparador físico) y Héctor Venturino y Argentino Pico (médicos). También estaban Roberto Valverde (masajista), Nilo Furlán y Celestino Bolchini (utileros) y César Mattiussi (canchero y padre de uno de los símbolos inalterables de Racing, la querida Tita).

Racing fue el primer campeón mundial argentino. Y en gran parte gracias al trabajo orfebre de Pizzuti. El próximo domingo, contra Atlético Tucumán, será una buena oportunidad para que en el Cilindro retumbe bien fuerte: "Y ya lo ve... y ya lo ve... es el Equipo de José".