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Mourinho fabrica un Manchester United a su imagen y semejanza en su segunda temporada

Lukaku's physical gifts make him an ideal fit in England's rough-and-tumble top division. (Getty)
Romelu Lukaku aportará potencia y velocidad al ataque del Manchester United (Foto: Getty)

A mediados de mayo, el Manchester United vivía a 24 puntos del campeón de liga, pero José Mourinho se mostraba optimista frente a la prensa. El técnico portugués veía a su equipo luchando por la Premier League la próxima temporada a poco que se reforzasen bien en el mercado veraniego. Como aval aportaba su dilatada experiencia en la construcción de equipos. “Lo que realmente disfruto haciendo es la transición de la primera temporada a la segunda porque se lo que hago y lo que no debo hacer”, añadió. Viendo entradas y salidas durante la era Mourinho los aficionados han acabado por darle la razón.

A Mourinho siempre se le ha afeado un estilo pragmático y una visión cortoplacista. El portugués ha sido descrito por los analistas como alguien demasiado impulsivo como para asegurar la estabilidad de un club a partir de la tercera temporada, pero la mayoría de sus movimientos recientes en el United sirven para desmontar el mito.

Los fichajes de Mourinho desde que llegó a Manchester en 2016 demuestran que el portugués está intentando construir un equipo de futuro, dejar un legado en Old Trafford que perdure incluso en un eventual ausencia suya. Golpes de mercado como los Paul Pogba, Eric Bailly, Victor Lindehoff o Romelu Lukaku y apuestas de cantera como Jesse Lindgard o Marcus Rashford no superan los 24 años. Mourinho los está explotando justo en el momento correcto para que acaben entregando sus mejores años de fútbol en el club.

El de Setubal se ha centrado en reforzar las zonas débiles de su equipo con talento duradero y también en fabricar un once fiel a su filosofía. Por lo que se ha visto en pretemporada, las señas de identidad del United que viene serán la solidez en defensa y la audacia en el contragolpe. Puro Mourinho.

En este aspecto, la más que posible llegada de Ivan Perisic, el volante zurdo del Inter, rápido y con un buen centro del que se debería nutrir Lukaku, refuerza ese concepto ofensivo clave en el plan de Mourinho. Pero incluso con la plantilla actual, con los Rashford, Mkhitaruayan, Pogba o Lukaku las tardes de vértigo a la contra deberían ser norma en un Old Trafford más que desangelado la temporada anterior. Mourinho busca un equipo joven, rápido y potente en el despliegue y está fichando y vendiendo (Ibrahimovic y Rooney) en consecuencia.

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