"El Mono Burgos y Gabriel Cedrés se la bancaban": Leonardo Astrada recordó la noche que se pelearon contra un grupo de rugbiers

En el programa ESPN Fútbol Show estuvieron invitados Leonardo Astrada y Facundo Villaba, exjugadores de River de la década del `90, y contaron el día que Germán Burgos y Gabriel Cedrés se enfrentaron a un grupo de jugadores de los Pumas.

El conductor del programa Alejandro Fantino contó que, según le dijeron, Gabriel Cedrés era el futbolista que mejor peleaba en el fútbol argentino. "Dicen las malas lenguas que se agarró a piñas contra los Pumas en los Arcos del Sol. Nosotros lo veíamos en el aeropuerto y agachábamos la cabeza. ¿Esa noche hubo tole tole en los Arcos del Sol, no?", le preguntó Fantino a Astrada.

En qué consistía la broma que hacían los jugadores de River durante los viajes

"Nosotros fuimos a Los Arcos a festejar el campeonato del Tolo Gallego. Estábamos dentro del boliche tomando algo y los rugbiers discutieron con el Mono Burgos. Sacaron a los rugbiers afuera, nosotros nos quedamos en el boliche y cuando salimos nos estaban esperando", contó Astrada sobre los acontecimientos de aquella noche.

Seguidamente, el excapitán de River explicó que tendrían que haber sacado del boliche también a Germán Burgos pero no lo hicieron para que no se encontraran afuera. Luego aseguró no saber si los jugadores pertenecían a los Pumas, pero que años después se enteró que uno era de un club de San Isidro.

"Salimos del boliche y estaban todos, eran corridas y piñas para todos lados. No se veía nada, estaba todo oscuro. Nosotros estábamos ahí, esquivábamos piñas, el Mono y Cedrés se la bancaban. Al otro día vamos a entrenar y ahí nos damos cuenta de cómo estaba la cara de cada uno, Burgos tenía la oreja muy hinchada", dijo Astrada sobre las secuelas de la pelea.

El exdelantero Facundo Villaba agregó: "Estaba loco Burgos, pero era un fenómeno de tipo. Te alegraba el plantel todo el tiempo. Mira que a veces no le tocaba jugar, porque jugaba Tito Bonano, pero él siempre tenía una sonrisa enorme".

Sobre el final y para seguir ahondando en la personalidad del entonces arquero de River, Astrada contó: "Cuando Pablo Aimar viene de salir campeón del mundo con la selección sub-20, encaró en mitad de cancha y Burgos lo cruzó y lo hizo volar tres metros para arriba. Estaba Davicce [presidente del club] en el banco y se agarraba la cabeza porque le rompía al pibe".