Miedo en el madridismo ante la plaga de renovaciones

Se ha convertido en costumbre esta semana nada más levantarnos. Café, cigarro y renovación de jugador del Real Madrid. Puede ser a través de un anuncio oficial, o con una entrevista en un periódico, o con un tuit dejando claras las intenciones del jugador de seguir. La realidad del equipo blanco es que el balance de la semana es que cinco jugadores confirman que seguirán: Kroos, Varane, Nacho, Asensio y Modric.

Toni Kroos, Luka Modric y Nacho Fernandez en Anoeta. (AP Photo/Alvaro Barrientos)
Toni Kroos, Luka Modric y Nacho Fernandez en Anoeta. (AP Photo/Alvaro Barrientos)

La cosa empezó el lunes con la ampliación del contrato del alemán, y no sentó demasiado bien ni al que escribe ni al aficionado medio. No era el momento, ni 24 horas después, de anunciarlo.

Como con Toni Kroos hay diversidad de opiniones sobre si debía de seguir o no, la cosa no fue a mayores. Pero es que después el que lo dijo fue Varane, a través de una entrevista en el diario Marca. Tal y como está el mercado, y viendo que los grandes centrales escasean y que De Ligt parece tener pie y medio en el Barça, pues bueno, pasable.

Pocas horas después se anunció lo de Nacho. Va a ser, a priori, el cuarto central, por lo que no parece representar un problema. Ha tenido un mal año, pero anteriormente siempre había cumplido y su papel no va a ser demasiado importante.

Vale, seguimos. Un tuit de Marco Asensio pidiendo perdón insinuaba ayer miércoles su continuidad. Sí, es joven y con talento y solo ha tenido una mala temporada, pero la cosa empieza ya a mosquear.

Y por último, este viernes, tenemos la renovación de Modric. Es debido a una cláusula de su contrato por haber ganado el Balón de Oro, aunque su continuidad se debe a que tiene el visto bueno de Zidane, que cuenta con un jugador clave en el lustro glorioso de los blancos.

Visto uno a uno, cada caso individual, se pueden poner a priori pocas pegas. Sin embargo no se puede entender este Real Madrid desde los casos particulares, hay que ver la globalidad, y esta es que el equipo necesita una renovación muy, muy profunda. Y si siguen casi todos, si los refuerzos son escasos, pequeños retoques aunque sean grandes jugadores, espera otro descalabro la temporada que viene.

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